/ sábado 3 de octubre de 2020

Democracia virtual | Le llueve a Morena por culpa de Evaristo 


Aunque algunos no lo quieran aceptar, tiene razón Dagoberto Lara Sedas, presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, al señalar que el alcalde de Centro prefiere andar de aplaudidor por la desaparición del Fonden, y en la grilla, que auxiliar a la población, pues en el ayuntamiento descuidaron criminalmente las acciones de infraestructura hidráulica, para evitar que Villahermosa se inundara a causa de las lluvias provocadas por los frentes fríos 4 y 5.

Todo indica que Evaristo Hernández Cruz no es para nada diligente ni proactivo, no aprendió a tomar previsiones en temporada de lluvias ni porque es la segunda vez que gobierna el municipio de Centro.

Se supone que el ayuntamiento cuenta con un mapeo de las zonas donde se acumula la mayor cantidad de agua y si los cárcamos funcionan pero el agua no se va, entonces se debe disponer a tiempo del personal necesario para reaccionar inmediatamente y destaparlos.

La obstrucción de la basura en los drenajes es un factor de anegación, pero la falta de conductos de mayor diámetro, la escasez de combustible y la falta de mantenimiento y reparación de cárcamos de bombeo, son indispensables en Villahermosa para evitar inundaciones cada vez que cae un aguacero.

Si el alcalde responsabiliza a la gente de la inundación en la capital del estado, no le podemos negar la razón, pero no porque muchos sean cochinos y tiren basura a la calle, ¡no!, los ciudadanos son los únicos responsables de lo que pasa en Villahermosa porque votó de nuevo por él, por el simple hecho de obedecer a López Obrador y tachar a ciegas las seis boletas de la elección de 2018 por Morena.

Estas inundaciones que no son al cien por ciento por la cantidad de lluvia que cae sino por el pésimo funcionamiento del deteriorado sistema de bombeo en la ciudad de Villahermosa, causa bloqueo de calles y pérdida del patrimonio de muchos de sus habitantes, pues se pierden muebles, ropa, aparatos eléctricos, automóviles, y los gobernantes con la mano en la cintura dicen: “es que la gente tira mucha basura en la calles”.

Villahermosa no debería inundarse por encharcamientos, pues tiene los ríos Grijalva y Carrizal para desalojar el agua, pero ¿cómo va a fluir el líquido si los cárcamos de bombeo no tienen bombas, y si cuentan con ellas no les suministran diesel, y si tienen combustible el encargado de operar esas estaciones se duerme, o definitivamente se ausenta del lugar y se va a su casa? ¿Cómo van a funcionar los cárcamos si las empresas contratadas no les dan mantenimiento ni los reparan a tiempo para enfrentar la temporada, aunque estén pronosticadas lluvias intensas?

Más que las precipitaciones pluviales provocadas por los frentes fríos 4 y 5, al gobierno de Morena le ha llovido, al menos en el municipio de Centro, porque se le ha dado prioridad a otras cosas y no a lo urgente y necesario.

¿Saben ustedes, mis fieles y leales cinco lectores, cuánta gente hay inconforme en este momento por la irresponsabilidad de los gobernantes de Morena? Ahora mismo les doy el dato.

De acuerdo a un boletín oficial, “126 mil ciudadanos de 117 comunidades de Centro, Cunduacán, Jalpa de Méndez y Nacajuca podrían verse afectadas por el desfogue de la presa Peñitas”. Imagínese usted qué tan felices deben estar todas esas familias. Deben estar cantando y aplaudiendo en espera de que llegue la inundación, ahogue sus animales, arrase todas sus pertenencias y tengan que salir a un albergue en tiempos de pandemia de Covid-19.

Y no faltará el defensor del gobierno morenista que dirá: pero eso es responsabilidad de la Comisión Federal de Electricidad. Efectivamente, es responsabilidad del gobierno federal ¿Y sabe usted quien es el presidente de la república? ¡Ese mero! Andrés Manuel López Obrador, aquel tabasqueño que criticaba con todo a la CFE cuando gobernaron el PRI y el PAN ¿qué le pasó ahora entonces ahora?

Si el presidente es un tabasqueño que conoce perfectamente el problema de su estado, sabe que se inunda con una lluvia y si turbinan a destiempo las presas del Alto Grijalva le parten el alma a miles de paisanos, ¿por qué no le pidió a Manuel Bartlett que tuviera especial cuidado en esos asuntos?


Aunque algunos no lo quieran aceptar, tiene razón Dagoberto Lara Sedas, presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, al señalar que el alcalde de Centro prefiere andar de aplaudidor por la desaparición del Fonden, y en la grilla, que auxiliar a la población, pues en el ayuntamiento descuidaron criminalmente las acciones de infraestructura hidráulica, para evitar que Villahermosa se inundara a causa de las lluvias provocadas por los frentes fríos 4 y 5.

Todo indica que Evaristo Hernández Cruz no es para nada diligente ni proactivo, no aprendió a tomar previsiones en temporada de lluvias ni porque es la segunda vez que gobierna el municipio de Centro.

Se supone que el ayuntamiento cuenta con un mapeo de las zonas donde se acumula la mayor cantidad de agua y si los cárcamos funcionan pero el agua no se va, entonces se debe disponer a tiempo del personal necesario para reaccionar inmediatamente y destaparlos.

La obstrucción de la basura en los drenajes es un factor de anegación, pero la falta de conductos de mayor diámetro, la escasez de combustible y la falta de mantenimiento y reparación de cárcamos de bombeo, son indispensables en Villahermosa para evitar inundaciones cada vez que cae un aguacero.

Si el alcalde responsabiliza a la gente de la inundación en la capital del estado, no le podemos negar la razón, pero no porque muchos sean cochinos y tiren basura a la calle, ¡no!, los ciudadanos son los únicos responsables de lo que pasa en Villahermosa porque votó de nuevo por él, por el simple hecho de obedecer a López Obrador y tachar a ciegas las seis boletas de la elección de 2018 por Morena.

Estas inundaciones que no son al cien por ciento por la cantidad de lluvia que cae sino por el pésimo funcionamiento del deteriorado sistema de bombeo en la ciudad de Villahermosa, causa bloqueo de calles y pérdida del patrimonio de muchos de sus habitantes, pues se pierden muebles, ropa, aparatos eléctricos, automóviles, y los gobernantes con la mano en la cintura dicen: “es que la gente tira mucha basura en la calles”.

Villahermosa no debería inundarse por encharcamientos, pues tiene los ríos Grijalva y Carrizal para desalojar el agua, pero ¿cómo va a fluir el líquido si los cárcamos de bombeo no tienen bombas, y si cuentan con ellas no les suministran diesel, y si tienen combustible el encargado de operar esas estaciones se duerme, o definitivamente se ausenta del lugar y se va a su casa? ¿Cómo van a funcionar los cárcamos si las empresas contratadas no les dan mantenimiento ni los reparan a tiempo para enfrentar la temporada, aunque estén pronosticadas lluvias intensas?

Más que las precipitaciones pluviales provocadas por los frentes fríos 4 y 5, al gobierno de Morena le ha llovido, al menos en el municipio de Centro, porque se le ha dado prioridad a otras cosas y no a lo urgente y necesario.

¿Saben ustedes, mis fieles y leales cinco lectores, cuánta gente hay inconforme en este momento por la irresponsabilidad de los gobernantes de Morena? Ahora mismo les doy el dato.

De acuerdo a un boletín oficial, “126 mil ciudadanos de 117 comunidades de Centro, Cunduacán, Jalpa de Méndez y Nacajuca podrían verse afectadas por el desfogue de la presa Peñitas”. Imagínese usted qué tan felices deben estar todas esas familias. Deben estar cantando y aplaudiendo en espera de que llegue la inundación, ahogue sus animales, arrase todas sus pertenencias y tengan que salir a un albergue en tiempos de pandemia de Covid-19.

Y no faltará el defensor del gobierno morenista que dirá: pero eso es responsabilidad de la Comisión Federal de Electricidad. Efectivamente, es responsabilidad del gobierno federal ¿Y sabe usted quien es el presidente de la república? ¡Ese mero! Andrés Manuel López Obrador, aquel tabasqueño que criticaba con todo a la CFE cuando gobernaron el PRI y el PAN ¿qué le pasó ahora entonces ahora?

Si el presidente es un tabasqueño que conoce perfectamente el problema de su estado, sabe que se inunda con una lluvia y si turbinan a destiempo las presas del Alto Grijalva le parten el alma a miles de paisanos, ¿por qué no le pidió a Manuel Bartlett que tuviera especial cuidado en esos asuntos?