El pasado 18 de julio el gobierno del estado de Tabasco, encabezado por Carlos Manuel Merino Campos, dio a conocer a los bancos ganadores de la invitación que se realizó para contratar un empréstito a corto plazo por hasta mil 500 millones de pesos, cifra que deberá pagarse en los próximos 12 meses.
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El secretario de Finanzas en la entidad, Luis Romero Gurría señaló el 13 de julio de este año que el gobierno del estado estaba analizando la posibilidad de contratar una nueva deuda a corto plazo para hacer frente a compromisos de fin de año.
Sin embargo, el secretario de Finanzas omitió mencionar que él mismo firmó desde el 24 de junio del año en curso las invitaciones que se hicieron llegar a diversos bancos privados para que presentaran propuestas económicas para el préstamo por un monto de mil 500 millones de pesos que el gobierno del estado de Tabasco está buscando contratar, y cuyo fallo se daría a conocer el 18 de julio. Sólo cinco días después de que el funcionario estatal señalara la posibilidad.
Los ganadores del proceso competitivo fueron el Grupo Financiero Banorte, que proporcionará 600 millones de pesos al gobierno estatal para pagar en un plazo de 300 días, mientras que el Grupo Financiero HSBC; BBVA de México y Banco Santander de México prestarán cada uno 300 millones de pesos al gobierno del estado, con una tasa promedio del 9 por ciento anual, la cual debe pagarse junto con el capital. Por lo que a la vuelta de un año, el estado estará desembolsando poco más de mil 635 millones de pesos a los bancos que proporcionan el dinero en estos momentos.
Desde el año 2019 la administración morenista encabezada primero por Adán Augusto López Hernández y después por Carlos Manuel Merino Campos, ha contraído cada año deudas a corto plazo, que en el primer año fue de 2 mil 500 millones de pesos; de 3 mil 300 millones en el 2020 y el año pasado; el 2021 cerró con 4 mil 260 millones de pesos solicitados a la banca privada, mismos que, al ser una deuda a corto plazo, no requiere autorización del Congreso del Estado, pero deben pagarse en menos de un año.
A pesar de que el Congreso del estado autorizó a finales del mes de agosto del año pasado que el gobierno estatal contrajera una deuda a largo plazo por mil 500 millones de pesos, el gobernador interino, apoyado por el nuevo secretario de Finanzas, decidió irse por un empréstito de corto plazo por el que se pagarán más de 135 millones de pesos sólo de intereses.
Cabe mencionar que de acuerdo al reporte trimestral del Instituto Belisario Domínguez sobre la deuda de las entidades federativas y los municipios, hasta el mes de marzo del presente año la deuda pública de Tabasco ascendía a 6 mil 215.6 millones de pesos, correspondiéndole a cada tabasqueño 2 mil 560. 3 pesos de ese pasivo.
Del total del endeudamiento, el 90.3 por ciento corresponde al gobierno estatal y sus entes públicos, mientras que el resto a los municipios y sus entes públicos.
En el mismo reporte se indica que el estado obtuvo el financiamiento en un 98 por ciento a través de la banca múltiple, y el resto con la banca de desarrollo. Su fuente de pago son las participaciones federales en un 68 por ciento; la deuda a corto plazo quirografaria en un 31.2 por ciento; y por ingresos propios en un 0.7 por ciento.
