En caso de emergencias lo primero con lo que debes contar es con sustento económico, ya sea por alguna enfermedad, accidente, muerte, desempleo e incluso por la inseguridad como un robo o secuestro.
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Tener un fondo de ahorro es indispensable para que cualquier persona pueda estar tranquila en caso de que necesite realizar un gasto fuerte o se quede sin solvencia económica por despido.
Y es que no contar con un ahorro puede crear problemas como por ejemplo que se tengan que pedir préstamos con tasas de interés altas o la necesidad de pedir prestado a personas que no son de fiar o simplemente no tener el dinero suficiente para pagar el imprevisto.
Es por eso que se recomienda que siempre se tenga una especie de “colchón financiero”, en cuanto al monto lo preferible es que sea entre 3 y 6 meses de gasto, lo que incluiría aproximadamente de 6 a 12 quincenas. Por supuesto puedes comenzar a ahorrar sin necesidad de sentir que el dinero no te rinde.
Uno de los primeros consejos consiste en calcular los gastos mensuales, para esto deberás saber cuánto gastas al mes, incluyendo tus gastos de alimentación, renta, servicios públicos, transporte, etc.
Esto te servirá para identificar en qué podrías recortar gastos, tal vez si tomas café todos los días podrías decidir que el dinero que gastarías los viernes en café lo guardarás para tus ahorros.
Incluso puedes destinar el cambio del transporte público o la despensa para poder ir armando tu fondo de ahorro. De igual manera es necesario estipular cuánto es la cantidad que consideras correspondiente ahorrar.
Puede ser que consideres mejor poner un monto fijo, o prefieras calcularlo en quincenas o en meses de gasto. Lo que sí es importante es que sea una cantidad lo suficientemente fuerte como para ayudarte en caso de una emergencia mayor.
Es recomendable que por lo menos el ahorro signifique tres meses de gasto, para poder calcularlo deberás ir anotando cuáles son tus necesidades básicas del mes y cuánto dinero destinas a ello.
El siguiente paso será abrir una cuenta, puedes abrir una cuenta de ahorro donde tendrás exclusivamente este dinero, aunque hoy en día los bancos te permiten que en una misma cuenta puedas manejar tu dinero de forma apartada.
