En su boletín mensual, la Academia Mexicana de Impacto Ambiental (AMIA) publica un artículo en donde se señala que el proyecto de la Refinería de Dos Bocas es un documento corto en su alcance, carece de estrategias de prevención y mitigación; pobre en cuanto a los impactos acumulativos y sinérgicos del proyecto.
En este texto publicado en la pagina 6 , se señala que en este proyecto que impulsa el gobierno federal a través de Pemex no se realiza un análisis del motivo por el cual Dos Bocas es el lugar idóneo para desarrollar esta obra.
Carece de un plan de acción de algo tan relevante como las estrategias para considerar que se cumple con el Acuerdo de París. Y además no hay descripción de los impactos que causaran las obras para proveer los insumos necesarios para la operación, como es la infraestructura necesaria para los servicios auxiliares ni de los impactos que representará el suministro de éstos servicios.
En el artículo de opinión firmado por Daniel Basurto González señala además que no existe información sobre los impactos sinérgicos que pueden afectar a la fauna, como es el caso del Manatí.
Indica que hay “silencio” total en el tema de la remoción forestal por la que la ASEA sancionó a la empresa que ejecutó la instrucción de talar un aproximado de 200 hectáreas .
Menciona que no se hace una evaluación del impacto que tendrá el uso de agua y, por consiguiente, tampoco de la descarga que se genere, lugar y probabilidad de su calidad. Aunque si existe un tema característico en este tipo de instalaciones, es el “olor” el cual sirve para la detección temprana, en ocasiones de siniestros, esto es, en la MIA-R de Dos Bocas, no es un elemento de interés considerando que solo se menciona “olor” en 6 ocasiones, siendo que el mismo estudio de riesgo se hace mención a casos de antecedentes de siniestros donde el tema olor fue de relevancia.
No se atiende en la Manifestación lo que el “Índice de Vulnerabilidad” representa, esto es, de acuerdo a la información científica obtenida, dicho índice es muy alto, solo por debajo de la Refinería Madero. En resumen de los 10 puntos, este organismo señala que en general, tanto la información reservada como la falta de compromisos que asumirá el responsable, en caso de abandono como se ha evidenciado últimamente y la carencia de indicadores para los parámetros ambientales que puedan ser o verse afectados, es por demás complejo que los expertos de la AMIA, puedan valorar la factibilidad de un posible mecanismo para verificar el cumplimiento de las medidas de prevención, mitigación y compensación que en su momento pudiera llegar a establecer la Autoridad, la que bien conoce y sabe el alcance y significado de la responsabilidad que tiene y en la que incurre en la evaluación de este tipo de proyectos. Desde luego, nos debe quedar claro que la ASEA no tiene tarea fácil teniendo además una sociedad vigilante y una Academia de Impacto Ambiental verificadora del trabajo que vaya a realizar. Próximamente, estaremos convocando a un desayuno de la AMIA para comentar en mayor detalle lo antes expuesto
No es suficiente Reunión Informativa
En el texto también se hace referencia a la Reunión Pública de Información (RPI), misma que se llevó a cabo en Paraíso, Tabasco, dentro del proceso administrativo de evaluación de la Manifestación de Impacto Ambiental Regional (MIA-R) que presentó el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) como promovente del Proyecto de la Refinería en Dos Bocas, Tabasco
Detalla que el evento parecía haber generado mayor expectativa, por la trascendencia del proyecto, por lo que se consideró que podría haber una mayor participación; sin embargo, indica el comentario que es posible que las condiciones económicas no lo permitieron.
“La Autoridad misma, tuvo una consideración similar, ya que el salón estaba preparado con un aproximado de 250 sillas y solo acudieron 73 personas de las cuales, 20 eran mujeres y 53 hombres, habiéndose registrado solo 8 ponencias, entre ellas la de la AMIA y 10 preguntas de los asistentes.
Quedo mclaro afirma el documento que, lo sucedido en la RPI no es suficientes para tener un panorama claro de lo que puede ser el proyecto que impulsa el Gobierno Federal, particularmente la Ing. Rocío Nahle y el Presidente Andrés Manuel López Obrador.