Durante la década de los ochenta del siglo XX, el puerto de Frontera vivió momentos de miedo por sus hijos pequeños, porque los principales diarios y periódicos locales decían que numerosos niños habían sido reportados como robados en Centla y en todo Tabasco.
Lee más: Avistan supuestos humanoides en parajes de Tabasco
El pánico no era para menos, porque nadie sabia quién o quiénes raptaban a los niños; las policías local y estatal sospechaban de una banda de traficantes dedicados a robar niños para venderlos en el extranjero, o en el más triste de los casos, vender sus órganos vitales.
Para esos tiempos se inicio la construcción del puente de Frontera, que comunicaría al puerto con los poblados que se encuentran al otro lado del río Grijalva. Y fue precisamente la construcción del puente la que dio origen a la famosa leyenda que se hizo popular en Frontera. Esta leyenda nos narra que cuando se construye un puente, se deben arrojar niños pequeños al concreto que se utiliza para construir los pilotes del puente, esto se hace para que el genio o dueño de las aguas (Yumja´), exige estos sacrificios para que no cause accidentes durante el proceso de construcción del puente, y para que el mismo dure mucho tiempo; por esa razón, los ingenieros a cargo de la construcción, por las noches y a través de un hechicero, sacrificaban niños para evitar accidentes en la obra y tener contento al dueño del agua.
Por tal motivo, muchos niños de diversas comunidades de Centla desaparecieron misteriosamente sin dejar rastros; los padres, asustados, no enviaban a sus hijos a la escuela, y si los enviaban, iban personalmente a llevarlos y recogerlos, pues la psicosis era colectiva y nadie quería perderlos.
Nunca se supo a ciencia cierta a dónde fueron a parar los niños desaparecidos, aunque había personas que afirmaban y juraban la veracidad de lo antes mencionado (los niños eran arrojados al concreto con el que se estaba construyendo el puente). La desaparición de los niños dejó de alertar a los padres al inaugurarse el puente de Frontera el día 2 de Febrero de 1986 por el entonces Gobernador del Estado, Enrique González Pedrero.
Trayendo de esta manera además de la calma a los hogares, una proyección vanguardista en comunicaciones modernas a la ciudad y puerto de Frontera, cuya leyenda y mito revivió con la construcción del puente de Ciudad del Carmen, en el vecino estado de Campeche, años más tarde.
Hoy en día, los ancianos chontales de Quintín Aráuz, pueblo yokot´an enclavado en el corazón de la reserva de la biosfera Pantanos de Centla, temen que esta leyenda reviva con la construcción del puente anunciado por el gobierno federal, pues en su cosmovisión, aun creen que el dueño del agua o Yumja´, exigirá sacrificios de niños para permitir la construcción de la obra, y de esta manera evitar accidentes durante el proceso.
Acerca del autor
Plácido Santana Hernández es un historiador, escritor y poeta de Centla, nacido en Villa Vicente Guerrero. Es egresado de la Licenciatura en Historia, carrera que estudió en la División Académica de de Ciencias Sociales y Humanidades de la UJAT; habla la lengua yokot’an; colaboró como docente e investigador en la Universidad Intercultural de Tabasco, el Instituto Tecnológico Superior de Centla y la Universidad Popular Autónoma de Veracruz.
Por sus conocimientos académicos, hablar la lengua yokot´an y ser un reconocido escritor y poeta tabasqueño, fue invitado a participar en foros como el Encuentro Nacional de Escritores y Poetas en Lengua Originaria, Encuentro Iberoamericano de Poesía Carlos Pellicer, Coloquio Internacional de Historia y Antropología en Tabasco, Jornadas Pellicerianas y Feria Internacional de Libro y la Lectura en Tabasco.
Ha escrito los libros Cuentos y Leyendas de Centla, Frontera; Historia Gráfica 1901 – 1923 Vol. I., Frontera; Historia Gráfica 1924 – 1937 Vol. II, Historias de Guerreros, La Rebelión delahuertista en Frontera; además, coordinó dos antologías poéticas: Del Tintero de Centla y El Pantano y sus Voces. También ha publicado diversas revistas y folletos donde difunde la historia y cultura del municipio de Centla.
También ha sido galardonado con los siguientes premios y reconocimientos: Premio Municipal de la Juventud Centla 2002, Premio Estatal Juvenil de Oratoria 2003, Premio Estatal de la Juventud Indígena 2005, Reconocimiento como Joven destacado de Centla, Reconocimiento como valor Juvenil de Centla por el Ayuntamiento de Centla 2007 – 2009, Premio Regional de la Cultura Festiva del Sureste Mexicano a través de la Crónica 2010 por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, Premio Estatal de la Juventud Bicentenario 2010, y Premio Estatal de Cuento Histórico 2015.
EL 26 de agosto de 2021, Centla lo nombró como su cronista, siendo el primer municipio en Tabasco en elegir un cronista municipal de origen yokot´an.