Furgo en Ruta fueron los invitados en la emisión de Nochebuena de El Atelier, el programa cultural de El Heraldo de Tabasco; el dueto integrado por Marta Tibau y Marià Miño, originario de Barcelona, contó sus experiencias y cómo inicio su travesía.
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Mencionaron que hay algo en Tabasco que los hace volver, al grado que ya son tres veces que visitan el estado. Los lugares que han visitado son Balancán, Comalcalco, Villahermosa, Centla, donde conocieron sus pantanos, y Jalpa de Méndez.
Aparte de ser diplomada en turismo, Marta es operadora de cámara, lo que le permitió trabajar en medios de comunicación por muchos años, incluso en productoras del medio ambiente. Por su parte Marià es licenciado en comunicación, y gracias a su profesión siempre ha estado ligado al periodismo. Es precisamente a través de los medios que coinciden en Andorra, donde ambos trabajaban. Las ruedas de prensa fueron el lugar donde tuvieron su primer contacto, y con el paso del tiempo se convierten en pareja; actualmente llevan 15 años juntos.
Cómo surge el proyecto
El punto de inicio de esta experiencia musical rodante fue la República Checa, prácticamente por obra de la casualidad; apenas con 10 euros fueron a aquel país, después a la India, la fascinación por este país les hizo quedarse por un mes; así surge la idea de vivir viajando, y nace Furgo en Ruta.
En su tierra, España, hicieron un serie que se tituló Furgo adictos, la cual compró una televisora local, y con el éxito que tuvieron se compraron la unidad donde viajan; con la segunda temporada, pudieron ahorrar para realizar su viaje al continente americano, llegando primero a Buenos Aires, Argentina.
¿Por qué América?
Uno de los motivos para escoger al continente y vivir esta aventura, fue por el idioma y porque querían iniciar por el más lejano. El año que iniciaron con esta actividad fue en 2012, interrumpiendo en 2020 su andar a causa del Covid-19. Retomando en febrero de 2021 su camino.
Además, en estos momentos están estrenando disco; el material está compuesto por nueve temas. Su costo es de 100 pesos. Su furgoneta, más que una forma de transporte para la talentosa pareja, es su casa; cada espacio es aprovechado a máximo, lo mismo es cocina que dormitorio. En uno de los costados de la singular máquina se lee: “viajando desde 2012”.
“La vivienda rodante” les ha llevado a 18 países de Latinoamérica; lo mismo han visto ciudades que ballenas. Asimismo, han tenido la oportunidad de conocer a diferentes personas y ganarse su confianza. Uno de sus objetivos es llegar a Alaska.