La pianista de 15 años será solista en el concierto de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) que se realizará en Bellas Artes
Como artista que interpreta a los clásicos, Daniela Liebman (14 junio -2002), hace una labor de investigación para darle a cada pieza esa intención que el compositor que interpreta vivía en el momento de crear.
La pianista, quien a su corta edad ha destacado por su virtuosismo, ha tenido contacto con la música culta desde que nació, debido a que su padre Robert Liebman es violinista y su abuela concertista de piano. Con toda esa sensibilidad que nace de sus manos, la joven de 15 años actuará hoy en el Palacio de Bellas Artes.
La tapatía, quien confiesa que fuera de la música clásica le gusta el jazz y los Beatles, ofrecerá esta noche piezas de Felix Mendelssohn y Hector Berlioz y hará su debut con la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), experiencia que repetirá el domingo 10 de junio, bajo la batuta del director huésped Pablo González .
El repertorio incluirá el concierto para piano núm. 1 en sol menor de Mendelssohn y la obertura de Carnaval romano y la Sinfonía fantástica de Berlioz y respecto a qué reto le implica interpretar en vivo a dichos músicos, la joven, quien el próximo jueves celebrará su cumpleaños número 16, expresó: .
“Musicalmente trato de encontrar una pieza y convertirla en algo propio. Hacerle caso a todo lo que el compositor ha escrito, a la acústica del teatro, a lo referente a cómo funciona todo en un concierto y a veces me cuesta trabajo involucrarme en lo externo, pero lo hago, soy muy perfeccionista”.
Y respecto a su trabajo de investigación de los autores cuya música toca al piano, Liebman, quien hará una gira por América Latina después de dicha presentación, informó que irá a Polonia para estudiar a Chopin porque para ella es “importante tocar la pieza como el compositor era como persona, analizarlo, y dar esa intención”.
Daniela, cuyo primer disco ya se encuentra disponible en plataformas digitales, reafirmo que representa para ella ser pianista: “La música es algo infinito que nunca acabas de aprender y descubrir”. Asimismo, se sintió complacida por influir en las nuevas generaciones para que encuentren su vocación en las Bellas Artes.
“Por eso trato de ir a las escuelas y hablar con los niños. Decirles lo que representa seguir una vocación musical y hacer esta información lo más accesible que se pueda a los jóvenes, porque cuando eres menor, es difícil tomar la iniciativa de qué camino seguir”, concluyó.
