Al hablar de tabasqueñas cuya labor ha enaltecido el nombre de nuestro estado a lo largo de la historia, no puede faltar el nombre de Esperanza Iris, conocida como la Diva de los Escenarios, quien se convirtió en la primera mujer de Tabasco en contar con un recinto teatral con su nombre en el Distrito Federal, mismo que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Un artículo publicado en el portal DeTabascoSoy.com, escrito por la periodista y promotora cultural Norma Domínguez de Dios, da cuenta de la vida y obra de la destacada mujer de origen tabasqueño en el ámbito de la cultura y las artes.
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¿Quién fue Esperanza Iris?
Nacida en San Juan Bautista, hoy Villahermosa, María Esperanza Bonfil, verdadero nombre de la cantante y actriz, era miembro de una numerosa familia de 22 hermanos. Hija de un celador de aduana y una profesora de escuela que desempeñaba otras labores para lograr el sustento familiar, inició su carrera artística a los nueve años en la compañía de teatro infantil de Austri y Palacios, con la obra “Las compras del Carreón”, en la que estuvo durante cinco años en el Teatro Arbeu, además de participar en zarzuelas.
Su consagración como actriz se dio con su interpretación del papelero en la revista “La cuarta plana” a los 14 años, y ya casada con el director de escena Miguel Gutiérrez, su fama se extendió a países del Caribe, principalmente Cuba con su actuación en la opereta “La viuda alegre”. Al enviudar, se casó en 1912 con Juan Palmer, y siguió con sus giras por el extranjero.
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En Brasil la nombraron Reina de la Opereta y Emperatriz de la Gracia; mientras que en España fue condecorada por el rey Alfonso XIII, país en donde se presentó con éxito con las obras “La viuda alegre”, “El conde de Luxemburgo” y “La princesa del dólar”.
Y fue en el año 1918, cuando estando en la cúspide de su carrera, construyó su propio teatro, acorde con La Scala de Milán; fue inaugurado por Venustiano Carranza como presidente, y estuvo en funciones por más de 40 años.
En 1922 fue declarada “Hija Predilecta de México” y filmó dos películas: “Mater Nostra” y “Noches de Gloria”. Como parte del arte lírico en México, en los años 30 se relacionó con músicos como Manuel M. Ponce y Ernesto Lecuona quien la acompañó en varios conciertos por todo el país.
Al enviudar por segunda vez, en 1939 dejó los escenarios y se dedicó a administrar la sala de espectáculos que llevó su nombre. Su tercer esposo, Francisco Sierra, fue acusado de fraguar la explosión de un avión comercial, motivo por el cual fue enviado a la prisión de Lecumberri; ante ello y a manera de labor social, Esperanza Iris organizó un coro en la penitenciaría.
Luego de 51 años fuera de los escenarios, la embajadora de Tabasco en el mundo regresó a su tierra natal, en donde ofreció funciones a favor de la Cruz Roja, además de reunir fondos para la construcción de los templos que destruyó Tomás Garrido Canabal durante su gobierno.
La Diva de los Escenarios murió el 7 de noviembre de 1962, y pasó el resto de su vida entre la iglesia, su casa y las visitas a la cárcel. Como homenaje póstumo a su trayectoria artística, los teatros estatales de Tabasco y del Distrito Federal fueron rebautizados como: Teatro Esperanza Iris, siendo este último declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Esperanza Iris es considerada una de las mujeres más importantes en la escena cultural mexicana. En Tabasco, el teatro que lleva su nombre fue inaugurado el 14 de diciembre de 1981, siendo presidente José López Portido, y gobernador Leandro Rovirosa Wade, con la actuación de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México.
* Con información de Norma L. Domínguez de Dios / De Tabasco Soy
