/ lunes 30 de diciembre de 2019

Tabasco Político | Soberbio, hasta las cachas

“La Soberbia es una discapacidad que suele afectar a Pobres Infelices Mortales, que se encuentran de golpe con una miserable cuota de Poder”, José de San Martín.

Como al anillo al dedo, le queda esta emblemática frase al titular del Instituto de Educación para Adultos de Tabasco (IEAT), Enrique Soberanes Rivera.

No sé a ciencia cierta, quién sea su padrino o madrina política (él, jura y perjura, que es Rosalinda López Hernández), pero este funcionario

desde hace tiempo, debió de ser relevado.

Llegó con la espada desenvainada.

Corrió a medio mundo, no sólo a los trabajadores de contrato, sino también a los que tenían plazas, con el objetivo de ir acomodando a su parentela.

Su presupuesto de este año asciende a 105, 078, 773 pesos. Más los $5,159,209 de pesos, para gastos de combustible.

Su ex directora Martha Osorio Broca manejó en el 2018: $101,240, 530 pesos. Casi dos millones de pesos menos en combustible.

Con resultados: veinte veces mejor.

En el último año de la maestra, el número de alfabetizados, rebasó los 15,800, quedando por certificar más de 23 mil. De estos en el 2019 solo lograron certificar a 13 mil.

De paso, revela el descontento interno existente por el maltrato y los raquíticos sueldos de que son objetos la mayoría de los 400 empleados, ya que mientras estos ganan 6 mil pesos mensuales, los altos mandos, se despachan con la cuchara grande.

Por ejemplo, el secretario Técnico, Hernán López Cerino, cobra 70 mil pesos. Su secretaria Particular, Rosa María Barrientos, igual. Sus directores de área: 50 mil pesos.

El mero chipocludo: 90 mil pesos.

Los mejores vehículos también ellos los cargan.

El colmo, su hijo, Enrique, que trabaja en el INVITAB, maneja un carro de la institución: Vento modelo 2018 placas NFT-4381.

Esto no es todo, al parecer está haciendo jugosos negocios con los dueños de Computel, José Izquierdo Segovia y Teresa de Jesús Vázquez Arce, que son sus compadres del alma, y dueños de otras empresas.

Y a todo esto, que dice el secretario de la Función Pública Jaime Antonio Farías Mora.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI” (LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)


La directora de la División Académica de Ciencias de la Salud (DACS), Miriam Carolina Martínez López, presiona con todo.

En cambio, el director de la División Académica de Ciencias Sociales (DACS), Fernando Rabelo Hartman, consciente de sus remotas posibilidades para arribar a la rectoría de la UJAT, inteligentemente optó mejor por tirar la toalla.

Los ecos de los nombres de Guillermo Narváez Osorio y Egla Cornelio Landero, suenan cada día más fuerte, dentro y fuera del alma mater, como los más probables para sustituir a José Manuel Piña Gutiérrez.

Aunque el secretario de Educación, lleva ligera ventaja, por su amplia trayectoria política y académica.

Y ya que andamos por la UJAT, el próximo 6 de enero de 2020, es el último informe del rector, para inmediatamente entrar de lleno en la justa por la rectoría.

¡Hagan sus apuestas¡ pues la sucesión va a calentarse aún mucho más. Y no es para menos, pues es mucho lo que está en juego.

Nos leemos el año que entra.

Pasen un Feliz Año Nuevo en compañía de familiares y amigos.

“La Soberbia es una discapacidad que suele afectar a Pobres Infelices Mortales, que se encuentran de golpe con una miserable cuota de Poder”, José de San Martín.

Como al anillo al dedo, le queda esta emblemática frase al titular del Instituto de Educación para Adultos de Tabasco (IEAT), Enrique Soberanes Rivera.

No sé a ciencia cierta, quién sea su padrino o madrina política (él, jura y perjura, que es Rosalinda López Hernández), pero este funcionario

desde hace tiempo, debió de ser relevado.

Llegó con la espada desenvainada.

Corrió a medio mundo, no sólo a los trabajadores de contrato, sino también a los que tenían plazas, con el objetivo de ir acomodando a su parentela.

Su presupuesto de este año asciende a 105, 078, 773 pesos. Más los $5,159,209 de pesos, para gastos de combustible.

Su ex directora Martha Osorio Broca manejó en el 2018: $101,240, 530 pesos. Casi dos millones de pesos menos en combustible.

Con resultados: veinte veces mejor.

En el último año de la maestra, el número de alfabetizados, rebasó los 15,800, quedando por certificar más de 23 mil. De estos en el 2019 solo lograron certificar a 13 mil.

De paso, revela el descontento interno existente por el maltrato y los raquíticos sueldos de que son objetos la mayoría de los 400 empleados, ya que mientras estos ganan 6 mil pesos mensuales, los altos mandos, se despachan con la cuchara grande.

Por ejemplo, el secretario Técnico, Hernán López Cerino, cobra 70 mil pesos. Su secretaria Particular, Rosa María Barrientos, igual. Sus directores de área: 50 mil pesos.

El mero chipocludo: 90 mil pesos.

Los mejores vehículos también ellos los cargan.

El colmo, su hijo, Enrique, que trabaja en el INVITAB, maneja un carro de la institución: Vento modelo 2018 placas NFT-4381.

Esto no es todo, al parecer está haciendo jugosos negocios con los dueños de Computel, José Izquierdo Segovia y Teresa de Jesús Vázquez Arce, que son sus compadres del alma, y dueños de otras empresas.

Y a todo esto, que dice el secretario de la Función Pública Jaime Antonio Farías Mora.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI” (LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)


La directora de la División Académica de Ciencias de la Salud (DACS), Miriam Carolina Martínez López, presiona con todo.

En cambio, el director de la División Académica de Ciencias Sociales (DACS), Fernando Rabelo Hartman, consciente de sus remotas posibilidades para arribar a la rectoría de la UJAT, inteligentemente optó mejor por tirar la toalla.

Los ecos de los nombres de Guillermo Narváez Osorio y Egla Cornelio Landero, suenan cada día más fuerte, dentro y fuera del alma mater, como los más probables para sustituir a José Manuel Piña Gutiérrez.

Aunque el secretario de Educación, lleva ligera ventaja, por su amplia trayectoria política y académica.

Y ya que andamos por la UJAT, el próximo 6 de enero de 2020, es el último informe del rector, para inmediatamente entrar de lleno en la justa por la rectoría.

¡Hagan sus apuestas¡ pues la sucesión va a calentarse aún mucho más. Y no es para menos, pues es mucho lo que está en juego.

Nos leemos el año que entra.

Pasen un Feliz Año Nuevo en compañía de familiares y amigos.