/ jueves 7 de enero de 2021

Tabasco político | Sin mayor transcendencia

Si el dirigente del PRD, Francisco Javier Cabrera Sandoval, y las demás cabezas de los grupos políticos que lo integran, hubieran hecho a un lado sus intereses, el partido en el gobierno tendría motivos más que suficientes para no conciliar el sueño.

Esto viene a colación, porque la alianza partidista entre el PRI y el PAN, para las elecciones intermedias no tiene la relevancia política-electoral que habría representado si el perredé se hubiera sumado a la coalición.

El blanquiazul no tiene la fuerza, ni la presencian que tienen el institucional y el sol azteca en Tabasco. Si con Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa en la presidencia de la República no significaron electoralmente nada, ahora no vale ningún cacahuate.

Así como leyó usted: ningún cacahuate, nadie da un peso por ellos.

Definitivamente en el 2021 el mapa electoral tabasqueño no va a cambiar gran cosa. Lo más seguro es que Morena va a ganar el grueso de los 17 municipios y de las 21 diputaciones de mayoría relativa.

Los escenarios políticos después de la próxima jornada electoral pudieron haber sido diferentes, pero las vísceras de los perredistas, me refiero obviamente, a quienes mueven los hilos del partido negro y amarillo, se impusieron a chaleco.

El único que salió beneficiado con la decisión autista del PRD, fue Morena. Es desde ahora, el gran triunfador.

Pueden seguir durmiendo a piernas sueltas. No hay mayor peligro. A sus adversarios políticos no les va alcanzar para quitarles la mayoría en el Congreso local ni en los municipios.

Si juntos no la tenían nada fácil, imagínense ir cada uno por su lado, como es el caso del PRI y PRD, a la contienda electoral, es auto-inmolador, destructivo, trágico.

La única oportunidad que tenían de disputarles seriamente los cargos de elección popular la dejaron ir. Y, escribo la dejaron ir, porque también el lidercillo del tricolor, Dagoberto Lara Sedas, es culpable de la exclusión del PRD.

Desde luego, que Alejandro Moreno Cárdenas, Jesús Zambrano Grijalva y Marko Antonio Cortés Mendoza (dirigentes nacionales) fueron los principales responsables de que la alianza entre PRI, PRD y PAN, no se lograra.

Y todo por no perder las prebendas presidenciales.

El meollo del asunto es que los acuerdos en lo oscurito de uno y otros, echaron por la borda, lo que pudo haber sido un combate de altura.


“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El ex secretario de la política interna, Marcos Rosendo Medina Filigrana, va a tener que sudar la camiseta, pues uno de sus contrincantes en el primer distrito electoral federal (Macuspana, Jonuta, Emiliano Zapata, Balancán y Tenosique) va a ser el ex líder del PRI, Erubiel Lorenzo Alonso Que.

Se la va a ver negra el ex legislador federal y local.

No solo porque Alonso Que tiene tiempo caminando esta zona, sino porque es un proverbial marrullero y mentiroso.

Para ser honestos, a Medina Filigrana no le pintan bien las cosas por allá, el pésimo trabajo de los presidentes municipales de Morena va a ser uno de los grandes escollos que tiene que saltar.

Sin omitir, que Jonuta está en manos del PRD.

Complicadísima la situación, para el oriundo de Jalpa de Méndez.

“Vamos a ver de qué cuero salen más correas”.

Si el dirigente del PRD, Francisco Javier Cabrera Sandoval, y las demás cabezas de los grupos políticos que lo integran, hubieran hecho a un lado sus intereses, el partido en el gobierno tendría motivos más que suficientes para no conciliar el sueño.

Esto viene a colación, porque la alianza partidista entre el PRI y el PAN, para las elecciones intermedias no tiene la relevancia política-electoral que habría representado si el perredé se hubiera sumado a la coalición.

El blanquiazul no tiene la fuerza, ni la presencian que tienen el institucional y el sol azteca en Tabasco. Si con Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa en la presidencia de la República no significaron electoralmente nada, ahora no vale ningún cacahuate.

Así como leyó usted: ningún cacahuate, nadie da un peso por ellos.

Definitivamente en el 2021 el mapa electoral tabasqueño no va a cambiar gran cosa. Lo más seguro es que Morena va a ganar el grueso de los 17 municipios y de las 21 diputaciones de mayoría relativa.

Los escenarios políticos después de la próxima jornada electoral pudieron haber sido diferentes, pero las vísceras de los perredistas, me refiero obviamente, a quienes mueven los hilos del partido negro y amarillo, se impusieron a chaleco.

El único que salió beneficiado con la decisión autista del PRD, fue Morena. Es desde ahora, el gran triunfador.

Pueden seguir durmiendo a piernas sueltas. No hay mayor peligro. A sus adversarios políticos no les va alcanzar para quitarles la mayoría en el Congreso local ni en los municipios.

Si juntos no la tenían nada fácil, imagínense ir cada uno por su lado, como es el caso del PRI y PRD, a la contienda electoral, es auto-inmolador, destructivo, trágico.

La única oportunidad que tenían de disputarles seriamente los cargos de elección popular la dejaron ir. Y, escribo la dejaron ir, porque también el lidercillo del tricolor, Dagoberto Lara Sedas, es culpable de la exclusión del PRD.

Desde luego, que Alejandro Moreno Cárdenas, Jesús Zambrano Grijalva y Marko Antonio Cortés Mendoza (dirigentes nacionales) fueron los principales responsables de que la alianza entre PRI, PRD y PAN, no se lograra.

Y todo por no perder las prebendas presidenciales.

El meollo del asunto es que los acuerdos en lo oscurito de uno y otros, echaron por la borda, lo que pudo haber sido un combate de altura.


“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El ex secretario de la política interna, Marcos Rosendo Medina Filigrana, va a tener que sudar la camiseta, pues uno de sus contrincantes en el primer distrito electoral federal (Macuspana, Jonuta, Emiliano Zapata, Balancán y Tenosique) va a ser el ex líder del PRI, Erubiel Lorenzo Alonso Que.

Se la va a ver negra el ex legislador federal y local.

No solo porque Alonso Que tiene tiempo caminando esta zona, sino porque es un proverbial marrullero y mentiroso.

Para ser honestos, a Medina Filigrana no le pintan bien las cosas por allá, el pésimo trabajo de los presidentes municipales de Morena va a ser uno de los grandes escollos que tiene que saltar.

Sin omitir, que Jonuta está en manos del PRD.

Complicadísima la situación, para el oriundo de Jalpa de Méndez.

“Vamos a ver de qué cuero salen más correas”.