/ viernes 10 de mayo de 2019

Refinería dos bocas: bien y mal

En Octubre del año 2009 el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa anunció la construcción de una refinería que de acuerdo al plan estaría concluida en 4 o 5 años. La propuesta fue respaldada por mayoría política, la izquierda mexicana representada por el PRD (antes de la creación de MORENA) en voz del tabasqueño Graco Ramírez Garrido secretario de la Comisión de Energía del Senado declaró en aquel momento que su partido había presentado esa propuesta mucho tiempo atrás y por ende la respaldaban total y absolutamente.

Ese anuncio del panista desató una competencia por el lugar en el que debería de instalarse y el gobernador Andrés Granier Melo acudió a presentar la propuesta de Dos Bocas, Paraíso, misma que no prosperó. El sitio elegido fue Tula, Hidalgo.

De esa refinería que se construiría en una superficie de 700 hectáreas solo se construyeron poco menos de 15 kilómetros de bardas perimetrales y dejó una deuda de mil 500 millones de pesos, nunca se concretó.

Campesinos que vendieron el 10 por ciento de sus tierras con la “promesa” de que darían servicio de transportación adquirieron camiones con lo que les pagaron al final los vendieron y se quedaron “como el perro de las dos tortas” sin sus tierras para trabajar y su plusvalía y sin camiones porque nunca se construyó esa refinería que fue cancelada definitivamente en 2014 por parte del presidente, Enrique Peña Nieto. Fin de esa historia.

Ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se declaró desierta la licitación de la refinería de Dos Bocas porque las empresas internacionales no se ajustaron al monto destinado para ese proyecto y confirmó que serán Petróleos Mexicanos y la Secretaría de Energía los responsables de su construcción.

En un contexto mundial en el que el gobierno solo regula, administra y sanciona o valida según sea el caso, el anuncio no es del todo malo.

En primer lugar habría que recordar que las empresas adjudicadas eran extranjeras por lo que la mayor parte de la derrama económica se iría a sus respectivos países al igual que la contratación del personal especializado –el mejor pagado- para desarrollar ese proyecto.

Declarar desierta la licitación abre el panorama para las empresas nacionales que podrían proveer una buena parte de los insumos –salvo los internacionales- y con ello obtendrían beneficios.

Lo único malo –aunque se otorga el beneficio de la duda- es que el gobierno ante cualquier eventualidad, sobrecosto o anomalía será juez y parte.

Grave es el exagerado protagonismo de la secretaria de energía, Rocío Nahle que mantiene abiertas disputas políticas –que son públicas y notorias- por alcanzar participación y control en todos los rubros del sector energético y peor aún el limitado margen de operación del titular de PEMEX Octavio Romero Oropeza que aun en contra de todo lo que se asegura está sumamente acotado y eso tendrá consecuencias.

El punto rescatable es que en términos de operación la ingeniería mexicana tiene un reconocimiento mundial por su alta capacidad y que desafortunadamente aquí no se ha reconocido.

Con esa garantía la refinería de Dos Bocas podría tener plena viabilidad aunque el riesgo de los tiempos y los ingresos será una posibilidad latente que la amenaza.

CONTORNO

La primera renuncia al gabinete…

Justo cuando el sector que representaba registraba los primeros indicadores positivos –por motivos de salud- antes de que finalice la quincena se hará efectiva la primera renuncia a una secretaría de la administración de Adán Augusto López Hernández.

El documento tiene carácter de irrevocable.

Una segunda dimisión aunque esta parecería hasta un “absurdo” por la forma en que ha trascendido la versión –por su propia boca- podría presentarse al término de la feria que es la fecha propuesta por el aludido.

En Octubre del año 2009 el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa anunció la construcción de una refinería que de acuerdo al plan estaría concluida en 4 o 5 años. La propuesta fue respaldada por mayoría política, la izquierda mexicana representada por el PRD (antes de la creación de MORENA) en voz del tabasqueño Graco Ramírez Garrido secretario de la Comisión de Energía del Senado declaró en aquel momento que su partido había presentado esa propuesta mucho tiempo atrás y por ende la respaldaban total y absolutamente.

Ese anuncio del panista desató una competencia por el lugar en el que debería de instalarse y el gobernador Andrés Granier Melo acudió a presentar la propuesta de Dos Bocas, Paraíso, misma que no prosperó. El sitio elegido fue Tula, Hidalgo.

De esa refinería que se construiría en una superficie de 700 hectáreas solo se construyeron poco menos de 15 kilómetros de bardas perimetrales y dejó una deuda de mil 500 millones de pesos, nunca se concretó.

Campesinos que vendieron el 10 por ciento de sus tierras con la “promesa” de que darían servicio de transportación adquirieron camiones con lo que les pagaron al final los vendieron y se quedaron “como el perro de las dos tortas” sin sus tierras para trabajar y su plusvalía y sin camiones porque nunca se construyó esa refinería que fue cancelada definitivamente en 2014 por parte del presidente, Enrique Peña Nieto. Fin de esa historia.

Ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se declaró desierta la licitación de la refinería de Dos Bocas porque las empresas internacionales no se ajustaron al monto destinado para ese proyecto y confirmó que serán Petróleos Mexicanos y la Secretaría de Energía los responsables de su construcción.

En un contexto mundial en el que el gobierno solo regula, administra y sanciona o valida según sea el caso, el anuncio no es del todo malo.

En primer lugar habría que recordar que las empresas adjudicadas eran extranjeras por lo que la mayor parte de la derrama económica se iría a sus respectivos países al igual que la contratación del personal especializado –el mejor pagado- para desarrollar ese proyecto.

Declarar desierta la licitación abre el panorama para las empresas nacionales que podrían proveer una buena parte de los insumos –salvo los internacionales- y con ello obtendrían beneficios.

Lo único malo –aunque se otorga el beneficio de la duda- es que el gobierno ante cualquier eventualidad, sobrecosto o anomalía será juez y parte.

Grave es el exagerado protagonismo de la secretaria de energía, Rocío Nahle que mantiene abiertas disputas políticas –que son públicas y notorias- por alcanzar participación y control en todos los rubros del sector energético y peor aún el limitado margen de operación del titular de PEMEX Octavio Romero Oropeza que aun en contra de todo lo que se asegura está sumamente acotado y eso tendrá consecuencias.

El punto rescatable es que en términos de operación la ingeniería mexicana tiene un reconocimiento mundial por su alta capacidad y que desafortunadamente aquí no se ha reconocido.

Con esa garantía la refinería de Dos Bocas podría tener plena viabilidad aunque el riesgo de los tiempos y los ingresos será una posibilidad latente que la amenaza.

CONTORNO

La primera renuncia al gabinete…

Justo cuando el sector que representaba registraba los primeros indicadores positivos –por motivos de salud- antes de que finalice la quincena se hará efectiva la primera renuncia a una secretaría de la administración de Adán Augusto López Hernández.

El documento tiene carácter de irrevocable.

Una segunda dimisión aunque esta parecería hasta un “absurdo” por la forma en que ha trascendido la versión –por su propia boca- podría presentarse al término de la feria que es la fecha propuesta por el aludido.