Si en Tabasco, tenemos más gente politizada, que en otros lares; pues imagínense la contienda sindical en la casa de la grilla por excelencia: la Cámara de Diputados.
Hay cerca de 200 trabajadores de base en dicho Congreso local. De ésos, aproximadamente, 110 integran al Sindicato Independiente de Trabajadores del Congreso del Estado (SITCET).
Asimismo, cerca de 66, conforman la delegación del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Estado de Tabasco (SUTSET); mientras que el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado y Municipios de Tabasco (STSEMT), estaría con aproximadamente 25 agremiados.
Podrían ustedes pensar que el título de esta columna obedece a los jaloneos dentro de los sindicatos mayoritarios.
Pues no, es el minoritario; incluso ni siquiera es por la titularidad de la delegación sindical, ¡sino por la Subdelegación!
La buscan, con afán y supuestamente con oportunidad: Birma Bautista Ahumada; Lucila Luna Pimienta; Marcos Junco Pérez; Yadira Pantoja Pérez; y, Gissela Hernández Zapata, de quien agregamos algo de su trayectoria.
Ella nació en Villahermosa, Tabasco, el 01 de agosto de 1981. Hija del señor Carlos Ever Hernández Cruz y de la señora Rosa María Zapata Hernández (QEPD). Es madre de Priscila García Hernández.
Hizo sus primeros estudios en la Escuela Primaria Elpidio López Escobar (1987-1993). Los siguientes en la Esc. Secundaria Técnica #9 (1993- 1996).
La Preparatoria la cursó en el Colegio de Bachilleres de Tabasco Plantel #1 (1996-1999).
Hizo sus estudios profesionales en la División Académica de Ciencias Biológicas, de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. Egresada de la Licenciatura en Biología (2000- 2005). Cédula profesional 7029590.
Entre sus principales actividades destacan:
Servicio social en el Laboratorio de Entomología, de la División Académica de Ciencias Biológicas UJAT.
Colaboración en el proyecto de “Claves Dicotómicas para Identificación de Afidos Vectores de Virus” en el mismo laboratorio antes citado.
Colaboración en el proyecto “Cultivos Múltiples en la Incidencia de Plagas, en un Cultivo de Chile Habanero, en el municipio de Cunduacán, Tabasco.” en el Laboratorio de Entomología de la UJAT.
Se desempeñó como docente de secundaria, de la materia Ciencias con Énfasis en Biología, en la Escuela Secundaria Federal “Leyes de Reforma” Nacajuca, Tabasco. Septiembre– diciembre 2006.
Coordinadora del Área de Vinculación con el Sector Productivo, en el H. Ayuntamiento Constitucional del municipio de Centro, adscrita al DIF municipal (2007- 2008).
Coordinadora de Talleres y Academias, en el H. Ayuntamiento Constitucional del municipio de Centro, adscrita al DIF municipal (2008- 2010).
Secretaria Técnica de la Comisión Orgánica de Equidad y Género de la sexagésima primera legislatura del H. Congreso del Estado de Tabasco (2013- 2015).
Secretaria Ejecutiva del Departamento de Servicios Generales adscrita a Administración, de la sexagésima segunda legislatura del H. Congreso del Estado de Tabasco (2016- 2018).
Comisionada en la delegación del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado y de los Municipios de Tabasco (STSEMT), desde principios del año, a la fecha.
La actual secretaria general del STSEMT, Marbella Cerino Pérez, es quien deberá vigilar dicha contienda, que, aunque aparentemente es de bajo perfil; atrás de la búsqueda de la posición, hay políticos de todos los calibres y de las distintas ideologías que convergen en el Congreso.
Los simpatizantes de la dama cuyo perfil aquí desglosamos, dicen que ella representa la experiencia, la conciliación, así como el espíritu de servicio, que el minoritario gremio exige en las actuales circunstancias sindicales.
Muchas veces no se saben de dónde brotan los problemas; ni como no pudimos percibirlos antes de que se conviertan en verdaderos dolores de cabeza.
Más aún cuando, quienes sostienen las actuales riendas legislativas, todavía no demuestran su habilidad política y/o parlamentaria; o queman sus pólvoras en infiernitos.
Así, resulta necesario que alguien vigile esa modesta elección, porque pueden prenderse fuegos políticos que luego pueden tornarse incontrolables.
Bastaría que alguien con agudeza, revise las fichas técnicas de las personas involucradas, así como sus vinculaciones políticas, para cerciorarse que nuestro aserto, no es letras al aire. Mientras habrá que desearle a Gissela, la mejor de las suertes, se la merece.
