Con el propósito de repetir, lo que exitosamente se logró con la fundación del Partido de la Revolución Democrática.
Cuando diversas fuerzas, Partidos y grupos, lograron consensos y sinergias que consiguieron cohesionarse, a pesar de sus individualidades y contradicciones; el pasado 24 de agosto se realizó la primera asamblea nacional de la plataforma Futuro 21, con un contexto muy similar al arriba mencionado.
Como en aquel entonces, hubo rostros políticos conocidos y fueron liderados por el ex priista José Narro y el excandidato presidencial, Gabriel Quadri, quienes criticaron al actual gobierno.
Así, Futuro 21 presentó su Manifiesto por la República, que incluye los lineamientos y propuestas que regirán a ese pretendido partido político, con 10 realidades de la vida nacional y 12 resolutivos.
Intentan aprovechar el actual registro del Sol Azteca para que una gran coalición de fuerzas progresistas construya una opción liberal, social-demócrata que haga frente a la “regresión populista que está viviendo México”.
Sin embargo, posteriormente, el PRD desmintió, en un comunicado, que vaya a ceder su registro como partido político; sin embargo, precisó, que sumará esfuerzos con la plataforma referida:
“En este proceso, el PRD no cederá su registro a Futuro 21. Esta plataforma es una iniciativa del PRD, Cambiemos, Vamos, Vamos Juntos, Une y Une Puebla, que busca construir una organización superior y una nueva mayoría. Esta organización superior aún no existe, y se trabaja para construirla".
Futuro 21 supuestamente busca alianzas con el PAN, Movimiento Ciudadano e incluso con Felipe Calderón y Margarita Zavala, con el fin de tener pluralidad y llenar el vacío que actualmente existe en el espectro político mexicano, que demanda una fuerza liberal, moderna y progresista.
Pretende venderse como una fuerza política que le haga un contrapeso real al actual gobierno. Una propuesta que supuestamente aglutine a la sociedad alrededor de valores democráticos y de unidad.
Pregonan representar “una opción liberal, socialdemócrata para redignificar la vida partidista de México; rechazar la visión clientelar, demagógica y populista; y competir en las elecciones de 2021 para restarle fuerza a Morena”.
Entre los nombres que sobresalen, además de Quadri y Narro: el ex jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera; el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles; Jesús Ortega Martínez, dirigente de la corriente perredista Nueva Izquierda.
Igualmente, el ex jefe delegacional Demetrio Sodi; la ex candidata a la Jefatura de Gobierno de la CDMX, Purificación Carpinteyro; Cecilia Soto, del Partido del Trabajo, Rubén Aguilar del PAN y Beatriz Pagés del PRI.
También, Jesús Zambrano; los dirigentes perredistas nacionales Ángel Ávila, Fernando Belaunzarán, Camerino Márquez, Estephany Santiago, Adriana Díaz, Karen Quiroga, Arturo Prida; así como Nora Arias, Víctor Hugo Lobo, Carlos Navarrete, Antonio Ortega, Antonio Medina, Guadalupe Acosta Naranjo, Ciro Mayen, Rodolfo Higareda, entre otros.
Además, presumen como aliados a miembros de la comunidad científica, académica y periodística como el escritor Bernardo Barranco, la periodista Tere Vale, Fluvio Ruiz, Julieta Fierro, Alma Maldonado, Luis Miguel Labardini y Miriam Grunstein.
Del mismo modo, participan organizaciones ciudadanas, como Vamos Juntos, Hijas de la MX, UNE, VAMOS y Cambiemos MX.
Recordemos que el PRD nació como una coalición de movimientos, organizaciones, Y, partidos políticos de izquierda, si bien sus fundadores pertenecían a la Corriente Democrática del PRI.
Su origen fue el Partido Mexicano Socialista (PMS) que nace de la fusión de 6 fuerzas políticas de Izquierda a nivel Nacional: Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), Partido Socialista Unificado de México (PSUM), Partido Patriótico Revolucionario (PPR), Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), Unión de la Izquierda Comunista (UIC); más adelante se unió una parte de la militancia del Partido Socialista de los Trabajadores (PST).
Ese instituto político cedió su registro en alianza con ex miembros del PRI, denominados Corriente Democrática, así como con organizaciones civiles que se opusieron al partido gobernante y pugnaron por elecciones democráticas, y nace el Partido de la Revolución Democrática.
De ahí que no hay nada nuevo bajo el sol, sino solo forcejeos por los rescoldos del otrora exitoso PRD.
