/ lunes 28 de enero de 2019

¡¡Justicia a secas!!

Si el gobernador Adán Augusto López Hernández tiene como su máximo referente a su ex par Arturo Núñez Jiménez para no cometer los mismos horrores que llevaron a la bancarrota económica, política y social a Tabasco, el presidente del TSJ, Enrique Priego Oropeza y el FGT Jaime Humberto Lastra Bastar tampoco deben repetir las pifias de Jorge Priego Solís y Fernando Valenzuela Pernas que desacreditaron y desprestigiaron a las instituciones de la procuración e impartición de justicia.

El ex gobernador y su ex secretario de Gobierno están obligados a actuar con mucho profesionalismo en el ominoso caso de los rapaces funcionarios que literalmente quebraron la hacienda estatal, incluyendo al propio ex mandatario y a su cónyuge Martha Lilia López Aguilera.

Con la misma vara tienen que ser medidos los ex ediles que hicieron de los presupuestos municipales su caja chica.

Si el Fiscal General Jaime Humberto Lastra Bastar no quiere correr la misma suerte que Valenzuela Pernas tiene que armar expedientes sólidos en los que jurídicamente no deje rendija alguna, para que sean castigados con prisión los ex servidores públicos locales que abusaron de sus encomiendas, tal y como no sucedió con el ex gobernador Andrés Rafael Granier Melo y su ex secretario de Finanzas José Manuel Saiz Pineda.

En los que el ex Procurador y ex Fiscal y su equipo de trabajo no pudieron sostener ante los tribunales federal y estatal ninguna de las acusaciones en su contra.

Terminaron convirtiéndolos en presos políticos. Casi…casi en mártires. ¡Hágame usted el favor!

Actuaron con las vísceras. Optaron por lo mediático y político, y finalmente, perdieron. Hicieron el ridículo de su vida.

Por ello, es importantísimo que Jaime Humberto Lastra Bastar y Enrique Priego Oropeza y el mismísimo inquilino de la Quinta Grijalva actúen apegado al Estado de Derecho, de lo contrario, va a concluir el sexenio como los que salieron huyendo por la puerta de atrás.

Los tabasqueños, y avecindados aquí, lo que quieren es lisa y llanamente: ¡¡justicia a secas!! Ni más ni menos.

No hay prisa, tienen todo el tiempo del mundo, para comprobarles fehacientemente que cometieron omisión, peculado, corrupción…y los que resulten de las indagatorias.

Material hay de sobra para que se pasen algunos añitos en prisión. Siempre y cuando haya la firme voluntad y decisión de acabar con la impunidad.

Y es que Amet Ramos Troconis, Rommel Franz Cerna Leeder, David Gustavo Rodríguez Rosario, Gustavo Rosario Torres, Juan Antonio Filigrana Castro, Ángel Solís Carballo y por supuesto Arturo Núñez Jiménez y su esposa Martha Lilia López Aguilera tienen que responder por todo el terrible daño que conscientemente hicieron a sus gobernados y a Tabasco.

Sería política y socialmente catastrófico para el nuevo gobierno que ello no ocurriera.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI” (LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

Todo el proceso de entrega-recepción fue un engaño, una burla. Todos los días se descubren más rapacerías en las dependencias gubernamentales. A como van avanzando más grande se va haciendo el hoyo financiero que dejó la administración pasada.

Es lo que tiene sumamente molesto al notario público con licencia -dicen sus cercanos- tal y como le sucedió a Arturo Núñez Jiménez en el 2012 con Andrés Rafael Granier Melo.

La misma película, con diferentes actores, aunque el actor central del filme continúa siendo Núñez Jiménez.

La inseguridad pública sigue creciendo exponencialmente en la mayoría de sus vertientes.

¿Hasta cuándo? Es la pregunta obligada.

Me imagino, que Ariel Cetina Bertruy está esperando que lo vayan a buscar con mariachi, ya que, hasta el pasado viernes, no se había presentado en el Servicio Estatal de Empleo e Ifortab.

O será cierto, de que no está contento con la encomienda que le dieron. Bueno…eso dicen.

¡Vaya usted a saber! Lo cierto es que no se ha presentado.

Si el gobernador Adán Augusto López Hernández tiene como su máximo referente a su ex par Arturo Núñez Jiménez para no cometer los mismos horrores que llevaron a la bancarrota económica, política y social a Tabasco, el presidente del TSJ, Enrique Priego Oropeza y el FGT Jaime Humberto Lastra Bastar tampoco deben repetir las pifias de Jorge Priego Solís y Fernando Valenzuela Pernas que desacreditaron y desprestigiaron a las instituciones de la procuración e impartición de justicia.

El ex gobernador y su ex secretario de Gobierno están obligados a actuar con mucho profesionalismo en el ominoso caso de los rapaces funcionarios que literalmente quebraron la hacienda estatal, incluyendo al propio ex mandatario y a su cónyuge Martha Lilia López Aguilera.

Con la misma vara tienen que ser medidos los ex ediles que hicieron de los presupuestos municipales su caja chica.

Si el Fiscal General Jaime Humberto Lastra Bastar no quiere correr la misma suerte que Valenzuela Pernas tiene que armar expedientes sólidos en los que jurídicamente no deje rendija alguna, para que sean castigados con prisión los ex servidores públicos locales que abusaron de sus encomiendas, tal y como no sucedió con el ex gobernador Andrés Rafael Granier Melo y su ex secretario de Finanzas José Manuel Saiz Pineda.

En los que el ex Procurador y ex Fiscal y su equipo de trabajo no pudieron sostener ante los tribunales federal y estatal ninguna de las acusaciones en su contra.

Terminaron convirtiéndolos en presos políticos. Casi…casi en mártires. ¡Hágame usted el favor!

Actuaron con las vísceras. Optaron por lo mediático y político, y finalmente, perdieron. Hicieron el ridículo de su vida.

Por ello, es importantísimo que Jaime Humberto Lastra Bastar y Enrique Priego Oropeza y el mismísimo inquilino de la Quinta Grijalva actúen apegado al Estado de Derecho, de lo contrario, va a concluir el sexenio como los que salieron huyendo por la puerta de atrás.

Los tabasqueños, y avecindados aquí, lo que quieren es lisa y llanamente: ¡¡justicia a secas!! Ni más ni menos.

No hay prisa, tienen todo el tiempo del mundo, para comprobarles fehacientemente que cometieron omisión, peculado, corrupción…y los que resulten de las indagatorias.

Material hay de sobra para que se pasen algunos añitos en prisión. Siempre y cuando haya la firme voluntad y decisión de acabar con la impunidad.

Y es que Amet Ramos Troconis, Rommel Franz Cerna Leeder, David Gustavo Rodríguez Rosario, Gustavo Rosario Torres, Juan Antonio Filigrana Castro, Ángel Solís Carballo y por supuesto Arturo Núñez Jiménez y su esposa Martha Lilia López Aguilera tienen que responder por todo el terrible daño que conscientemente hicieron a sus gobernados y a Tabasco.

Sería política y socialmente catastrófico para el nuevo gobierno que ello no ocurriera.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI” (LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

Todo el proceso de entrega-recepción fue un engaño, una burla. Todos los días se descubren más rapacerías en las dependencias gubernamentales. A como van avanzando más grande se va haciendo el hoyo financiero que dejó la administración pasada.

Es lo que tiene sumamente molesto al notario público con licencia -dicen sus cercanos- tal y como le sucedió a Arturo Núñez Jiménez en el 2012 con Andrés Rafael Granier Melo.

La misma película, con diferentes actores, aunque el actor central del filme continúa siendo Núñez Jiménez.

La inseguridad pública sigue creciendo exponencialmente en la mayoría de sus vertientes.

¿Hasta cuándo? Es la pregunta obligada.

Me imagino, que Ariel Cetina Bertruy está esperando que lo vayan a buscar con mariachi, ya que, hasta el pasado viernes, no se había presentado en el Servicio Estatal de Empleo e Ifortab.

O será cierto, de que no está contento con la encomienda que le dieron. Bueno…eso dicen.

¡Vaya usted a saber! Lo cierto es que no se ha presentado.