/ viernes 8 de marzo de 2019

Innecesaria rudeza

El gobernador Adán Augusto López Hernández podrá tener muchos defectos, pero nunca se le ha acusado de insensible, indolente, al contrario, quienes lo conocen de cerca, afirman que es muy humano, muy sensible.

Esto viene a colación, porque en su gobierno se está despidiendo a trabajadores no solo de manera arbitraria, sino con una innecesaria rudeza.

En algunos casos, descaradamente les impiden entrar a sus centros de labores. Y en otros, los mandan a descansar hasta por 15 días, para tener el justificante legal, para de plano correrlos, cesarlos, humillarlos.

Si bien es cierto, de que tenemos una burocracia obesa, y que, por ende, es necesario y urgente adelgazarla, por el daño que produce al erario estatal, también es cierto, de que hay formas y maneras para reducir el aparato burocrático.

Si alguien está obligado a actuar y respetar el Estado de Derecho, ese es, precisamente el gobierno. Con este tipo de acciones, no va a lograr su propósito central, pues a la larga, va a perder en los tribunales, lo que va a costarle millones de pesos a la hacienda pública estatal.

No creo que estén pensando como los ex y ediles, que corren a gente, para dejar los laudos al presidente municipal que lo releva, tal y como puntualmente se ha venido haciendo durante varias décadas.

Les voy a dar un ejemplo, en la coordinación de Modernización Administrativa e Innovación Gubernamental que pertenece a la Secretaría de Administración e Innovación Gubernamental, que encabeza Oscar Trinidad Palomera Cano, se vienen cometiendo una serie de acciones en contra de quienes laboran ahí, que ya provocó, que se fueran a quejar a la Procuraduría de la Defensa de los Trabajadores.

Y es que el responsable de la coordinación Guillermo Castro García llegó con la espada desenvainada. Corren a todo mundo. No tomando en cuenta, conocimientos, capacidad, méritos… Todo, absolutamente todo.

Lo peor es que están siendo inmerecidamente sustituidos por personal menos capacitados, menos aptos.

Lo graves es que esta es la tónica que se está empleando en varias dependencias gubernamentales. Lo que va a generarle más problemas políticos, económicos y sociales al gobierno de Adán Augusto López Hernández.

Este tipo de comportamiento, lo único que genera es encono, más del que socialmente ya hay.

Como dijera el Divo de Juárez: “…pero qué necesidad…”.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El secretario de Gobierno, Marcos Medina Rosendo Filigrana, está haciendo su chamba, está en lo suyo.

La reunión que tuvo con cada uno de los dirigentes de los partidos políticos, incluyendo con el de Morena, dejó muy buen sabor de boca.

Agradó a todos, hasta sus detractores y contestatarios tuvieron que reconocerle su habilidad, audacia y pericia política.

Sin lugar a dudas, fue un buen acercamiento, que, con el tiempo, puede resultar muy positivo para el desarrollo del Estado de Tabasco.

Sin mucho ruido, se anotó otro diez.

Sigilosa y astutamente tendió los puentes, y salió a pedir de boca.

Ojalá y no sea la primera, ni la última.

Definitivamente, ganaron todos los participantes.

Cuando hay voluntad y diálogo, muchas cosas se pueden conseguir en beneficio de la entidad y de los propios actores políticos.


El gobernador Adán Augusto López Hernández podrá tener muchos defectos, pero nunca se le ha acusado de insensible, indolente, al contrario, quienes lo conocen de cerca, afirman que es muy humano, muy sensible.

Esto viene a colación, porque en su gobierno se está despidiendo a trabajadores no solo de manera arbitraria, sino con una innecesaria rudeza.

En algunos casos, descaradamente les impiden entrar a sus centros de labores. Y en otros, los mandan a descansar hasta por 15 días, para tener el justificante legal, para de plano correrlos, cesarlos, humillarlos.

Si bien es cierto, de que tenemos una burocracia obesa, y que, por ende, es necesario y urgente adelgazarla, por el daño que produce al erario estatal, también es cierto, de que hay formas y maneras para reducir el aparato burocrático.

Si alguien está obligado a actuar y respetar el Estado de Derecho, ese es, precisamente el gobierno. Con este tipo de acciones, no va a lograr su propósito central, pues a la larga, va a perder en los tribunales, lo que va a costarle millones de pesos a la hacienda pública estatal.

No creo que estén pensando como los ex y ediles, que corren a gente, para dejar los laudos al presidente municipal que lo releva, tal y como puntualmente se ha venido haciendo durante varias décadas.

Les voy a dar un ejemplo, en la coordinación de Modernización Administrativa e Innovación Gubernamental que pertenece a la Secretaría de Administración e Innovación Gubernamental, que encabeza Oscar Trinidad Palomera Cano, se vienen cometiendo una serie de acciones en contra de quienes laboran ahí, que ya provocó, que se fueran a quejar a la Procuraduría de la Defensa de los Trabajadores.

Y es que el responsable de la coordinación Guillermo Castro García llegó con la espada desenvainada. Corren a todo mundo. No tomando en cuenta, conocimientos, capacidad, méritos… Todo, absolutamente todo.

Lo peor es que están siendo inmerecidamente sustituidos por personal menos capacitados, menos aptos.

Lo graves es que esta es la tónica que se está empleando en varias dependencias gubernamentales. Lo que va a generarle más problemas políticos, económicos y sociales al gobierno de Adán Augusto López Hernández.

Este tipo de comportamiento, lo único que genera es encono, más del que socialmente ya hay.

Como dijera el Divo de Juárez: “…pero qué necesidad…”.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El secretario de Gobierno, Marcos Medina Rosendo Filigrana, está haciendo su chamba, está en lo suyo.

La reunión que tuvo con cada uno de los dirigentes de los partidos políticos, incluyendo con el de Morena, dejó muy buen sabor de boca.

Agradó a todos, hasta sus detractores y contestatarios tuvieron que reconocerle su habilidad, audacia y pericia política.

Sin lugar a dudas, fue un buen acercamiento, que, con el tiempo, puede resultar muy positivo para el desarrollo del Estado de Tabasco.

Sin mucho ruido, se anotó otro diez.

Sigilosa y astutamente tendió los puentes, y salió a pedir de boca.

Ojalá y no sea la primera, ni la última.

Definitivamente, ganaron todos los participantes.

Cuando hay voluntad y diálogo, muchas cosas se pueden conseguir en beneficio de la entidad y de los propios actores políticos.