El programa “Adiós a tu deuda” será modificado. La visita del presidente Andrés Manuel López Obrador deja ese resultado tras escuchar la petición de los pueblos chontales en voz de su representante el pasado viernes en Tamulté de las Sabanas, Centro, lugar que alzó la voz a finales del año pasado y hasta coqueteó con el PRI para resucitar la resistencia civil.
Los focos rojos prendieron desde entonces y escaló porque se trata de un problema generalizado. La llamada tarifa de periodo invernal vino a desnudar las fallas del programa, si bien en su concepto conlleva el objetivo del borrón y cuenta nueva, así como haber fijado la tarifa 1F.
Las palabras presidenciales no dejan lugar a dudas: “Va a venir el director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, para bajar tarifas y que paguen lo justo por la misma”. Esto lo afirmó en todos los sitios que visitó el fin de semana, a lo cual obtuvo como respuesta una ovación.
Lo que viene lo adelantó ya el gobernador Adán Augusto López Hernández tras el cónclave con los dirigentes de los partidos políticos representados en el Congreso, Morena, PRD, PRI y PVEM en Palacio de Gobierno, un día antes de la llegada del presidente.
Ante la creciente inconformidad no solo mostrada en redes sociales por parte de los usuarios sino en los hechos al haberse desplomado la asistencia de morosos a firmar sus convenios, se dio un trabajo político auspiciado por el gobernador para amarrar la modificación del programa y a la par incluir a las fuerzas partidistas a manera de una decisión consensuada que en términos políticos desactive cualquier intento de revivir la resistencia civil.
Habrá que esperar ahora cuándo vendrá el director de la CFE, luego de la palabra presidencial y saber qué habrá de afinarse en el programa para beneficio de los bolsillos familiares mediante el pago justo de los consumos, en vista de los largos periodos de altas temperaturas que, con el cambio climático, se prevé serán más altas al paso de los años.
La idea consensuada entre gobierno y partidos es un mecanismo para aumentar el subsidio durante la temporada invernal –que en Tabasco es prácticamente inexistente- y así haya una especie de facturación promedio durante todo el año bajo los beneficios de la tarifa 1F.
El gobernador adelantó que de ser así, esto no aplicaría ya para el presente periodo invernal, al que le falta el mes de marzo, por lo cual aplicaría a partir del próximo periodo octubre-marzo; es decir, sin retroactividad. Así que lo que venga en estos días en los recibos habrá que pagarlo.
Son varios los ángulos por revisar. Sin duda el tiempo corre y, en los hechos, el problema no ha tenido una solución satisfactoria a 14 meses del inicio de la administración estatal y a 15 meses de la federal. Por lo pronto, el compromiso del presidente ha sido renovado y todo indica será ya definitivo el desenlace del conflicto arrastrado desde 1995.
HOJAS SUELTAS…
“Para que nadie se vaya a equivocar, ya saben que es Adán, es mi hermano. Y vamos a seguir trabajando juntos, nada de pleitos, necesitamos unirnos, es la hora, es el tiempo de Tabasco, del Sureste”, exclamó el presidente al respaldar al gobernador López Hernández. En los hechos, ajustar la tarifa de luz dará un respiro ante el cúmulo de necesidades en las comunidades. Los tabasqueños quieren que se vea más respaldo federal en Tabasco, sobre todo en obras de infraestructura municipal y estatal, así como de inversiones productivas que reactiven la economía. Con eso seguro las grillas permanentes bajarán de intensidad, pues obras son amores.
