/ viernes 9 de julio de 2021

Entorno | Traficantes de la desgracia

Para no generalizar y menos particularizar, en estos días, una acción volvió a repetirse en distintos hogares de los municipios donde se destinaron apoyos extraordinarios en especie por inundaciones y asomó lo peor de muchos ciudadanos que fueron evidenciados por traficar con la desgracia.

El 07 de junio, los camiones de la Secretaría de la Defensa Nacional, junto con su personal operativo retomaron la entrega de enseres domésticos a ciudadanos afectados en mayor y en menor medida -en determinados casos sin ninguna- por las inundaciones que se registraron a finales del año 2020 que fue suspendido de manera provisional por el desarrollo del proceso electoral.

Los paquetes consisten en: un refrigerador, una estufa, licuadora, ventilador, colchón y un juego de sartenes.

Los beneficiados en total: 200 mil 400 familias tabasqueñas, de acuerdo a lo declarado por el secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval Gómez; en números redondos, es decir, 200 mil 400 paquetes que incluyen los seis enseres contemplados.

A estos beneficiados, de manera preliminar les fueron entregados 10 mil pesos para cada uno de ellos, para destinarlos a labores de limpieza al interior de sus casas.

En el caso del gobierno federal cumplió con la demanda que escuchó en cada comunidad -aunque suene perverso- para atender el lamento colectivo de siempre “lo perdí todo, no me dio tiempo de sacar nada” por eso se procedió a reintegrar aquellos enseres nuevos que son más útiles para una vivienda.

En tanto que, los 10 mil pesos en efectivo al mismo número de beneficiarios, entregados en diciembre del año pasado para acciones de limpieza integral, detergentes, pinturas, cemento, cal, pocos lo emplearon para ello, el resto, en realidad lo usó para adquirir una televisión nueva o cualquier otro aparato de entretenimiento, incluso, en los grandes centros comerciales de la entidad en esas fechas, en el área de artículos de electrónica se leían carteles que decían “producto agotado” todo ello, coincidentemente después de dispersarse el recurso federal.

Y la venta y reventa:

Esta semana, en una colonia popular de Villahermosa, apenas los elementos del Ejército Mexicano descargaban los enseres casa por casa, camionetas de carga llegaban y recogían principalmente refrigeradores y estufas para trasladarlos a otros domicilios y distintos propietarios, cuando uno pregunta, si es que acceden a responder, solo ofrecen evasivas o argumentos por demás absurdos.

En los chats de WhatsApp de ciudadanos que habitan en fraccionamientos, colonias, rancherías o entre familias se ofrecen en venta los enseres recibidos, es tan descarado que inclusive, circulan hasta peticiones sarcásticas en donde se pregunta, por ejemplo, si el refrigerador en caso de ser adquirido sería entregado a puerta de casa del nuevo propietario como lo hace el ejército.

De las muchas historias vergonzosas se sabe de personas que se dedicaron a comprar lotes completos de refrigeradores -a precios de ganga- que posteriormente comenzaron a venderse y se siguen comercializando en municipios de Chiapas, Campeche, Veracruz y desde luego, aquí en la entidad, en aquellas localidades que no sufrieron afectaciones y por ende no tuvieron acceso a ese beneficio.

De lo anterior existe abundante evidencia, así como pasó en 2007 con los vales de 10 mil pesos que otorgó el gobierno de Felipe Calderón y que se vendían hasta en cantinas por montos menores a esa cantidad ahora ha ocurrido lo mismo, probablemente fueron los mismos beneficiarios del pasado.

Quizá en el futuro inmediato, un mejor destino de esa derrama millonaria debería ser la creación de infraestructura para que atenuar estas contingencias multianuales.

Por cierto, ya estamos de nuevo, en pleno periodo de lluvias y con la posibilidad de más inundaciones.

¿Se repetirá el ciclo?


CONTORNO


Malquerientes y prioridades en Cunduacán:

Ejido San Rafael, Cunduacán.

En el segundo punto de la gira del pasado lunes del gobernador Adán Augusto López Hernández en el que entregó acciones de pavimentación en cuatro sectores importantes de Cunduacán, incluida la cabecera municipal, en el segundo punto, la alcaldesa Nidia Naranjo Cobián, quien le acompañó, al hacer uso de la palabra, reprochó las versiones de algunos que, según ella, la señalan de no tener en el olvido

las comunidades:

“Para esos que dicen que no atiendo a las comunidades, quiero decirles que, aunque no me baje, constantemente superviso y recorro el municipio y para esos que quieren que ya me vaya, aunque otros me piden que no, a ellos les digo que seguiré dando la lucha…”.

La arenga, fuera de contexto, por las acciones entregadas, sirven para recordar que uno de los poblados más importantes por su aportación económica y productiva, Cucuyulapa, vive desde hace semanas una nueva crisis, como la que vivió a mediados del sexenio pasado, una ola de asaltos, violencia y otros delitos de competencia federal, pero que, en el caso de la primera autoridad, el municipio, su autoridad ha estado completamente ausente y lejos de ese importante sector de la población.

Para no generalizar y menos particularizar, en estos días, una acción volvió a repetirse en distintos hogares de los municipios donde se destinaron apoyos extraordinarios en especie por inundaciones y asomó lo peor de muchos ciudadanos que fueron evidenciados por traficar con la desgracia.

El 07 de junio, los camiones de la Secretaría de la Defensa Nacional, junto con su personal operativo retomaron la entrega de enseres domésticos a ciudadanos afectados en mayor y en menor medida -en determinados casos sin ninguna- por las inundaciones que se registraron a finales del año 2020 que fue suspendido de manera provisional por el desarrollo del proceso electoral.

Los paquetes consisten en: un refrigerador, una estufa, licuadora, ventilador, colchón y un juego de sartenes.

Los beneficiados en total: 200 mil 400 familias tabasqueñas, de acuerdo a lo declarado por el secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval Gómez; en números redondos, es decir, 200 mil 400 paquetes que incluyen los seis enseres contemplados.

A estos beneficiados, de manera preliminar les fueron entregados 10 mil pesos para cada uno de ellos, para destinarlos a labores de limpieza al interior de sus casas.

En el caso del gobierno federal cumplió con la demanda que escuchó en cada comunidad -aunque suene perverso- para atender el lamento colectivo de siempre “lo perdí todo, no me dio tiempo de sacar nada” por eso se procedió a reintegrar aquellos enseres nuevos que son más útiles para una vivienda.

En tanto que, los 10 mil pesos en efectivo al mismo número de beneficiarios, entregados en diciembre del año pasado para acciones de limpieza integral, detergentes, pinturas, cemento, cal, pocos lo emplearon para ello, el resto, en realidad lo usó para adquirir una televisión nueva o cualquier otro aparato de entretenimiento, incluso, en los grandes centros comerciales de la entidad en esas fechas, en el área de artículos de electrónica se leían carteles que decían “producto agotado” todo ello, coincidentemente después de dispersarse el recurso federal.

Y la venta y reventa:

Esta semana, en una colonia popular de Villahermosa, apenas los elementos del Ejército Mexicano descargaban los enseres casa por casa, camionetas de carga llegaban y recogían principalmente refrigeradores y estufas para trasladarlos a otros domicilios y distintos propietarios, cuando uno pregunta, si es que acceden a responder, solo ofrecen evasivas o argumentos por demás absurdos.

En los chats de WhatsApp de ciudadanos que habitan en fraccionamientos, colonias, rancherías o entre familias se ofrecen en venta los enseres recibidos, es tan descarado que inclusive, circulan hasta peticiones sarcásticas en donde se pregunta, por ejemplo, si el refrigerador en caso de ser adquirido sería entregado a puerta de casa del nuevo propietario como lo hace el ejército.

De las muchas historias vergonzosas se sabe de personas que se dedicaron a comprar lotes completos de refrigeradores -a precios de ganga- que posteriormente comenzaron a venderse y se siguen comercializando en municipios de Chiapas, Campeche, Veracruz y desde luego, aquí en la entidad, en aquellas localidades que no sufrieron afectaciones y por ende no tuvieron acceso a ese beneficio.

De lo anterior existe abundante evidencia, así como pasó en 2007 con los vales de 10 mil pesos que otorgó el gobierno de Felipe Calderón y que se vendían hasta en cantinas por montos menores a esa cantidad ahora ha ocurrido lo mismo, probablemente fueron los mismos beneficiarios del pasado.

Quizá en el futuro inmediato, un mejor destino de esa derrama millonaria debería ser la creación de infraestructura para que atenuar estas contingencias multianuales.

Por cierto, ya estamos de nuevo, en pleno periodo de lluvias y con la posibilidad de más inundaciones.

¿Se repetirá el ciclo?


CONTORNO


Malquerientes y prioridades en Cunduacán:

Ejido San Rafael, Cunduacán.

En el segundo punto de la gira del pasado lunes del gobernador Adán Augusto López Hernández en el que entregó acciones de pavimentación en cuatro sectores importantes de Cunduacán, incluida la cabecera municipal, en el segundo punto, la alcaldesa Nidia Naranjo Cobián, quien le acompañó, al hacer uso de la palabra, reprochó las versiones de algunos que, según ella, la señalan de no tener en el olvido

las comunidades:

“Para esos que dicen que no atiendo a las comunidades, quiero decirles que, aunque no me baje, constantemente superviso y recorro el municipio y para esos que quieren que ya me vaya, aunque otros me piden que no, a ellos les digo que seguiré dando la lucha…”.

La arenga, fuera de contexto, por las acciones entregadas, sirven para recordar que uno de los poblados más importantes por su aportación económica y productiva, Cucuyulapa, vive desde hace semanas una nueva crisis, como la que vivió a mediados del sexenio pasado, una ola de asaltos, violencia y otros delitos de competencia federal, pero que, en el caso de la primera autoridad, el municipio, su autoridad ha estado completamente ausente y lejos de ese importante sector de la población.