Desarrollada por el matemático John Von Neumann casi a mediados del siglo pasado la teoría de juegos es un área de las matemáticas aplicadas que estudia interacciones en estructuras formalizadas de incentivos y que en el campo económico ha contribuido a comprender de manera adecuada la naturaleza humana al momento de la toma de decisiones (una condición humana que es distinta entre individuos de sociedades de países desarrollados, subdesarrollados como México, incluso entre sus entidades) en pleno desarrollo del proceso electoral y dada las condiciones imperantes podrían resultar de utilidad para tratar de entender todo lo que está en juego.
Los políticos suelen decir que entre ellos –existen diferencias ideológicas- que no son personales, pero, eso es una falacia, porque chocan temperamentos, intereses, poder, control, lealtad, sumisión y muchos otros comportamientos que se convierten en factores determinantes, en otras palabras, sus elecciones no siempre son las mejores y aunque lo asuman como tal, corren y asumen sus riesgos.
En esta competencia electoral donde interactúan distintos actores, en la que disputan posiciones, caben lealtad pero también traición, en la concepción de la teoría de juegos, el juego representa un conflicto en el que imperan distintos intereses y donde cada decisión que adopte –el jugador- influirá en la decisión que tomará el contrario.
Desde una óptica particular la parte más importante es –jugar de manera racional- incluso de negociar, particularmente cuando se adviertan situaciones confusas, engañosas o una doble intencionalidad, la idea es a partir de su inclusión en un conflicto –juego- la decisión que adopte dependerá totalmente de su interacción en determinado momento.
En la toma de decisiones –que implican el beneficio o perjuicio de las mayorías- debería imperar la razón más que la emoción. Pienso luego existo, decía René Descartes; explicado en la teoría de Sigmund Freud, sobre el Yo, Ello y Superyó, que no se imponga la parte más primitiva del ser humano que implica el “ello” totalmente inconsciente, a diferencia del “yo” la más racional y cercana a la realidad.
En función de lo anterior, cualquier decisión que adopten cada uno de los jugadores influirá en el presente y en el futuro inmediato, se sabe –porque así se quiere comunicar o simplemente por la naturaleza tabasqueña- que existe un marcado interés del titular de la Secretaría de Bienestar, Javier May Rodríguez por colocar el mayor número de candidatos (jugadores) en las diputaciones y alcaldías en este proceso electoral para –en el caso de que ganen- tener un pequeño ejército de aliados en pos de la gubernatura de Tabasco en el 2024 (¿no era mejor aspirar a suceder al Presidente de la República?) incluso, se han cambiado candidatas por candidatos en municipios ya definidos para reducir a una sola opción de género a las demarcaciones con más población electoral.
En el terreno del juego cuentan todos, los que actualmente detentan el poder en las tres instancias de gobierno, quienes renunciaron y los que buscan participación electoral mantienen interlocución no solo al interior de su partido, sino al exterior, los opositores y determinados actores políticos que podrían resultar claves en el resultado forman parte de esos diálogos.
Que nadie se sorprenda…
Y una alegoría práctica…la catafixia de Chabelo:
El exitoso programa “En familia con Chabelo” empleó la “teoría de juegos” con la famosa Catafixia, que era la última parte del programa en donde los niños que habían obtenido el mayor número de regalos –hasta ese momento del juego- se les ponía frente a tres bóvedas independientes cada una de ellas solo al interior de una había un regalo que superaba en precio o en dinero en efectivo lo acumulado, pero, los otros dos ofrecían algo insignificante tanto como un simple lápiz.
La condición para entrar al juego era renunciar…a todo lo obtenido previamente, casi siempre para tomar esa decisión los niños pedían la autorización de los padres, las veces que lo vi en su gran mayoría, los mayores autorizaban al niño a entrar a la Catafixia porque el premio más grande casi siempre era una sala, comedor, cocina de una conocida mueblería, dicho de otro modo, anteponían su interés –probablemente para beneficiar a toda la familia- al del menor.
Se entiende que algo similar podría ocurrir aquí…
CONTORNO
Acuerdos y desacuerdos
¡Sálvese quien pueda!
El ex gobernador Andrés Rafael Granier Melo se inscribirá en los próximos días como aspirante a la candidatura del PRI a la alcaldía de Centro.
Su aspiración responde a una especie de reivindicación del pasado, no cabe otra justificación, aseguran, el anuncio formal sería el próximo mes.
Otro ex gobernador, Manuel Andrade Díaz buscaría la misma posición solo que por el Partido de la Revolución Democrática –kafkiano- y es cuestión de tiempo para que se formalice, él, admite, que está más que interesado.
Por el partido gobernante, poco se sabe, salvo, la natural interpretación política que apunta a una mujer como candidata.
En este escenario, algunos no dan por un hecho tales candidaturas, inclusive en círculos de alto nivel, no obstante, entre el honor y los acuerdos no escritos, todo puede suceder.
En municipios como Emiliano Zapata, Tacotalpa, Nacajuca, Cunduacán, Jalapa, Cárdenas, Huimanguillo y por supuesto el Centro campea la confusión, la promesa y… el engaño.
javiermarinhdez@hotmail.com
