Al tan promocionado anuncio en campaña y como autoridades electas sobre la construcción de la refinería de Dos Bocas, Paraíso, Tabasco que se iniciaría casi a la par de la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador (1 diciembre 2018) y fuera del reiterado cliché de más inversiones, empleos y otros beneficios -ese mismo día en el inicio del proceso de entrega-recepción con la anterior administración- cuestioné al entonces gobernador electo Adán Augusto López Hernández con la finalidad de que ofreciera una fecha, un dato preciso, sobre cuando en realidad iniciaría su construcción y su respuesta fue:
“la construcción de la refinería debe de estar iniciando a más tardar en febrero del año próximo, habrá, eso sí, trabajos complementarios en los cuáles el gobierno federal contará con la total disposición del gobierno de Tabasco…”.
Y estamos en Marzo.
La parte del gobierno estatal sí se cumplió con la habilitación de la mayor parte de la superficie en donde se supone se iniciaría la construcción de la refinería el mes pasado.
¿Y qué pasó?
El 8 de diciembre del 2018 en la presentación del Plan Nacional de Refinación al que asistió el jefe del ejecutivo federal y que tuvo como sede el Puerto de Dos Bocas, hubo un cambio en el discurso oficial y se anunció que la fecha para comenzar el proceso de licitaciones sería marzo.
Hace algunas semanas, la secretaria de energía, Rocío Nahle sin afirmarlo enmendó la estimación al precisar que la licitación “podría ser en abril”.
Aún están pendientes los permisos de impacto ambiental y para la construcción específicamente de un proyecto denominado “Refinería de Dos Bocas” mismo que según la secretaria del medio ambiente, Josefa Ortiz Blanco en declaraciones en Villahermosa “estarían listos a más tardar en diciembre del 2018”. Ni una cosa ni otra.
Ahora se especula que en realidad podría arrancarse a finales del año y quedar concluida no en tres años, sino incluso en cinco, es decir, el último de la administración actual.
Los grandes inversionistas, los medianos, los pequeños empresarios del país y la iniciativa privada local –no acostumbrada a los riesgos- ven con pesimismo lo que parecía una gran oportunidad.
CONTORNO
Ley ISSET especulación
La sentencia lapidaria de Fernando Mayans Canabal director del ISSET: “esa ley está hecha con las patas” a la redacción que dio paso a la nueva norma jurídica que regula los derechos y obligaciones de quienes forman parte de esa institución a partir de la reforma aprobada en 2015 continúa siendo objeto de controversia sobre la inviabilidad de la misma y que hasta hace poco reunía –el consenso de quienes gobernaban- pero conforme transcurre el tiempo parece clara la decisión que adoptara la Suprema Corte de Justicia de la Nación al recurso de inconstitucionalidad promovido por la Comisión Nacional de Derechos Humanos y que también impugnó PRI y PVEM además de cientos de amparos por parte de trabajadores.
Carlos Benito Lara director jurídico del Congreso de Tabasco pidió no especular respecto al sentido en el que resolverá la Corte el recurso presentado al tiempo que precisó que ninguna opinión cuenta más que el fallo que emitan los magistrados, por lo que en nada favorecen los pronunciamientos en uno u otro sentido.
Independientemente de las condiciones que establece la nueva ley deberá quedar claramente delimitado; el tema de la equidad de género, distinciones para hombres y mujeres, el aumento para la edad del retiro, el incremento gradual del 8 al 16 por ciento en las cuotas que pagan los trabajadores y que ya se ajustó en los 3 años anteriores.
Es cuestión de horas para que se conozca el sentido del fallo de la Suprema Corte sobre la citada ley, cualquiera que sea tendrá repercusiones importantes para las partes involucradas.
