/ martes 3 de diciembre de 2019

De Primera Mano | UJAT, el saqueo de nunca acabar

Si el ‘grupo Universidad’ capitaneado por la exrectora Candita Gil Jiménez logra volver a dejar a un incondicional en lugar del actual "encargado del despacho", José Manuel Piña Gutiérrez, serán por lo menos 20 años que la institución seguirá sin rendirle cuentas a nadie.

Las posibilidades de que esa cofradía mantenga el control de la máxima casa de estudios choca son amplias: Candita ha logrado acomodar a sus piezas en cargos administrativos claves, lo que le da el poder en el tablero político de la institución.

Por ejemplo Dora María Frías Márquez tiene ocho años de ser secretaria de Servicios Académicos, y es de las absolutas confianzas de la priísta, y también ha sido un soporte importante del actual rector.

Este grupo ha ampliado sus redes a otras instituciones, como en el caso de la Universidad Tecnológica de Tabasco (UTT), en donde despacha Lenin Martínez Pérez, quien por dos períodos fue director de la División Académica de Ciencias Económico-Administrativa (DACEA).

Impulsado por Gil Jiménez, Pánfilo Morales de la Cruz lleva como contralor de la universidad ¡16 años!, lo cual indica que le conoce las entrañas al monstruo desde que su patrona se hizo cargo.

El ‘grupo UJAT’ tiene como ‘gallos’ a: Fernando Rabelo Hartman, director de la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades (DACSyH); Rubicel Cruz Romero, secretario de Servicios Administrativo, y Egla Cornelio Landero, profesora investigadora y secretaria de Movilidad del gabinete.

La idea de que Candita y su grupo se ‘inmortalicen’ es que sus rectores sigan sin aclarar en qué se han gastado el cuantioso presupuesto. Y es que existe la presunción de que han robado sumas cuantiosas.

Verbigracia, el actual “encargado del despacho”, Piña Gutiérrez, no revisó la contabilidad en los dos períodos de Gil Jiménez por razones que tienen que ver con las denuncias de presuntos desfalcos millonarios de donde han salido inversiones para “edificar” escuelas privadas bajo sospecha.

Si Candita y su gente logran imponérsele a la ‘4T criolla’, seguramente Piña Gutiérrez no será auditado el año próximo y las denuncias de enriquecimiento ilícito en su contra serán archivadas.

El Gobierno de la llamada 'Cuarta transformación' está empujando al secretario de Educación, Guillermo Narváez Osorio, a quien el ‘Grupo Universidad’ le ha desatado una campaña por su desafortunada declaración de que los maestros “no aguantan” tres quincenas sin cobrar.

Por el lado de la izquierda aparece como única aspirante la doctora en medicina nuclear, Miriam Carolina Martínez López, directora de la División Académica de Ciencias de la Salud (DACS), a quien la comunidad prefiere.

La también luchadora social ha participado, desde sus inicios, en el movimiento de Andrés Manuel López Obrador en Tabasco.

Vaya, el domingo que rindió su primer informe de gobierno el presidente de origen tabasqueño, Martínez estuvo en el zócalo de la capital del país vitoreando al paisano, con cuyo grupo compacto tiene acercamiento.

Si la 4T ‘sección Tabasco’ optara por la obradorista, concitaría el apoyo de maestros y alumnos, que ya no quieren todo lo prohijado por Candita y que se traduce en negocios oscuros presuntamente salidos de la UJAT, a la cual se tiene sin fiscalizar desde hace casi un cuarto de siglo.

¿Le ganará Gil Jiménez las ‘vencidas’ al gobernador Adán Augusto López Hernández como se lo hizo a Andrés Granier Melo y a Arturo Núñez Jiménez?

Si el ‘grupo Universidad’ capitaneado por la exrectora Candita Gil Jiménez logra volver a dejar a un incondicional en lugar del actual "encargado del despacho", José Manuel Piña Gutiérrez, serán por lo menos 20 años que la institución seguirá sin rendirle cuentas a nadie.

Las posibilidades de que esa cofradía mantenga el control de la máxima casa de estudios choca son amplias: Candita ha logrado acomodar a sus piezas en cargos administrativos claves, lo que le da el poder en el tablero político de la institución.

Por ejemplo Dora María Frías Márquez tiene ocho años de ser secretaria de Servicios Académicos, y es de las absolutas confianzas de la priísta, y también ha sido un soporte importante del actual rector.

Este grupo ha ampliado sus redes a otras instituciones, como en el caso de la Universidad Tecnológica de Tabasco (UTT), en donde despacha Lenin Martínez Pérez, quien por dos períodos fue director de la División Académica de Ciencias Económico-Administrativa (DACEA).

Impulsado por Gil Jiménez, Pánfilo Morales de la Cruz lleva como contralor de la universidad ¡16 años!, lo cual indica que le conoce las entrañas al monstruo desde que su patrona se hizo cargo.

El ‘grupo UJAT’ tiene como ‘gallos’ a: Fernando Rabelo Hartman, director de la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades (DACSyH); Rubicel Cruz Romero, secretario de Servicios Administrativo, y Egla Cornelio Landero, profesora investigadora y secretaria de Movilidad del gabinete.

La idea de que Candita y su grupo se ‘inmortalicen’ es que sus rectores sigan sin aclarar en qué se han gastado el cuantioso presupuesto. Y es que existe la presunción de que han robado sumas cuantiosas.

Verbigracia, el actual “encargado del despacho”, Piña Gutiérrez, no revisó la contabilidad en los dos períodos de Gil Jiménez por razones que tienen que ver con las denuncias de presuntos desfalcos millonarios de donde han salido inversiones para “edificar” escuelas privadas bajo sospecha.

Si Candita y su gente logran imponérsele a la ‘4T criolla’, seguramente Piña Gutiérrez no será auditado el año próximo y las denuncias de enriquecimiento ilícito en su contra serán archivadas.

El Gobierno de la llamada 'Cuarta transformación' está empujando al secretario de Educación, Guillermo Narváez Osorio, a quien el ‘Grupo Universidad’ le ha desatado una campaña por su desafortunada declaración de que los maestros “no aguantan” tres quincenas sin cobrar.

Por el lado de la izquierda aparece como única aspirante la doctora en medicina nuclear, Miriam Carolina Martínez López, directora de la División Académica de Ciencias de la Salud (DACS), a quien la comunidad prefiere.

La también luchadora social ha participado, desde sus inicios, en el movimiento de Andrés Manuel López Obrador en Tabasco.

Vaya, el domingo que rindió su primer informe de gobierno el presidente de origen tabasqueño, Martínez estuvo en el zócalo de la capital del país vitoreando al paisano, con cuyo grupo compacto tiene acercamiento.

Si la 4T ‘sección Tabasco’ optara por la obradorista, concitaría el apoyo de maestros y alumnos, que ya no quieren todo lo prohijado por Candita y que se traduce en negocios oscuros presuntamente salidos de la UJAT, a la cual se tiene sin fiscalizar desde hace casi un cuarto de siglo.

¿Le ganará Gil Jiménez las ‘vencidas’ al gobernador Adán Augusto López Hernández como se lo hizo a Andrés Granier Melo y a Arturo Núñez Jiménez?