/ martes 9 de febrero de 2021

De Primera Mano | 2021 pero mirando a 2024

Las fuerzas políticas de Tabasco se alistan en el presente proceso electoral para estar en las mejores condiciones de cara al relevo gubernamental de 2024. Los movimientos de hoy son para que el futuro no los agarre mal parados.

De tal manera que ya es posible observar, tanto del lado del régimen como de la oposición, que la vista está puesta en plazas estratégicas para enfrentar los siguientes comicios con relativa holgura.

A no dudarlo, la capital tabasqueña y el Congreso local están en la mira telescópica de los contendientes.

Para resguardar el poder, el partido en el gobierno ha mostrado tener objetivos claros en la conducción del palacio municipal y de la Cámara de Diputados.

Así, con Yolanda Osuna Huerta compitiendo por la alcaldía de Centro, Morena aseguraría que dentro de tres años el edil capitalino no será actor en la sucesión gubernamental; y como la exfuncionaria no pertenece a ningún grupo de interés, se abstendría de apoyar a algún prospecto lanzado fuera de órbita del círculo gobernante.

El Congreso local también será de mucha importancia: a la Legislatura que entrará en funciones este año le compete calificar a las autoridades que surjan del proceso de 2024.

En ese poder el vinotinto necesitará a un operador con las mejores cartas de recomendación, y para esa posición se encamina Jaime Lastra Bastar, un cuadro versado en temas de política interna y de seguridad, que, además, es respetado en la oposición por ser partidario del diálogo.

La “cereza del pastel” en las votaciones del próximo 6 de junio no parece estar en riesgo para el régimen: ningún personaje de los citados en la oposición tiene la estatura para hacer que los ciudadanos voten por ellos en lugar que lo hagan por sus partidos en ruinas.

A la vista de los últimos acontecimientos, PRD y PRI –segunda y tercera fuerza política del estado, según el resultado de las votaciones de 2018– se encuentran inmersos en reyertas internas que los alejan de los votos.

Con la sombra del exgobernador Arturo Núñez Jiménez sobre sus espaldas, el sol azteca solo tiene un par de puntos en la intención del voto.

Unas encuestas lo ponen en 2 por ciento; la que más le da lo ubica en 5 por ciento.

El Revolucionario Institucional, quien se encontraba “mejor” (con un 11 por ciento de la preferencia), acaba de hundirse por el manejo desaseado que hizo el presidente del CEN, Alejandro Moreno Cárdenas, de las candidaturas plurinominales a diputados federales.

Lo que pasa en el negriamarillo y en el tricolor fortalecen aún más al partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por eso solo que ocurra un tsunami político, de aquí a mediados de año, es que puede pensarse en la derrota morenista, mas no hay nada en el horizonte que ensombrezca al movimiento del presidente.

La anticipada victoria del régimen, sin embargo, es perjudicial para la ciudadanía: como hace tres años, los tabasqueños no tendrán contrapesos en 2024.

PARA SU INFORMACIÓN…

EL MANDATARIO ADÁN Augusto López Hernández presentó ayer al Congreso local la terna para la elección del nuevo fiscal tabasqueño, tras la separación definitiva del cargo de Jaime Lastra. Los propuestos son Perla del Carmen Macossay Moreno, Nicolás Bautista Ovando y Elías Germán Arzubide Dagdug; el segundo de la lista, actual vicefiscal encargado del despacho, es parte de la administración que encabezó Lastra y, como tal, pertenece al equipo que modernizó la institución.

Las fuerzas políticas de Tabasco se alistan en el presente proceso electoral para estar en las mejores condiciones de cara al relevo gubernamental de 2024. Los movimientos de hoy son para que el futuro no los agarre mal parados.

De tal manera que ya es posible observar, tanto del lado del régimen como de la oposición, que la vista está puesta en plazas estratégicas para enfrentar los siguientes comicios con relativa holgura.

A no dudarlo, la capital tabasqueña y el Congreso local están en la mira telescópica de los contendientes.

Para resguardar el poder, el partido en el gobierno ha mostrado tener objetivos claros en la conducción del palacio municipal y de la Cámara de Diputados.

Así, con Yolanda Osuna Huerta compitiendo por la alcaldía de Centro, Morena aseguraría que dentro de tres años el edil capitalino no será actor en la sucesión gubernamental; y como la exfuncionaria no pertenece a ningún grupo de interés, se abstendría de apoyar a algún prospecto lanzado fuera de órbita del círculo gobernante.

El Congreso local también será de mucha importancia: a la Legislatura que entrará en funciones este año le compete calificar a las autoridades que surjan del proceso de 2024.

En ese poder el vinotinto necesitará a un operador con las mejores cartas de recomendación, y para esa posición se encamina Jaime Lastra Bastar, un cuadro versado en temas de política interna y de seguridad, que, además, es respetado en la oposición por ser partidario del diálogo.

La “cereza del pastel” en las votaciones del próximo 6 de junio no parece estar en riesgo para el régimen: ningún personaje de los citados en la oposición tiene la estatura para hacer que los ciudadanos voten por ellos en lugar que lo hagan por sus partidos en ruinas.

A la vista de los últimos acontecimientos, PRD y PRI –segunda y tercera fuerza política del estado, según el resultado de las votaciones de 2018– se encuentran inmersos en reyertas internas que los alejan de los votos.

Con la sombra del exgobernador Arturo Núñez Jiménez sobre sus espaldas, el sol azteca solo tiene un par de puntos en la intención del voto.

Unas encuestas lo ponen en 2 por ciento; la que más le da lo ubica en 5 por ciento.

El Revolucionario Institucional, quien se encontraba “mejor” (con un 11 por ciento de la preferencia), acaba de hundirse por el manejo desaseado que hizo el presidente del CEN, Alejandro Moreno Cárdenas, de las candidaturas plurinominales a diputados federales.

Lo que pasa en el negriamarillo y en el tricolor fortalecen aún más al partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por eso solo que ocurra un tsunami político, de aquí a mediados de año, es que puede pensarse en la derrota morenista, mas no hay nada en el horizonte que ensombrezca al movimiento del presidente.

La anticipada victoria del régimen, sin embargo, es perjudicial para la ciudadanía: como hace tres años, los tabasqueños no tendrán contrapesos en 2024.

PARA SU INFORMACIÓN…

EL MANDATARIO ADÁN Augusto López Hernández presentó ayer al Congreso local la terna para la elección del nuevo fiscal tabasqueño, tras la separación definitiva del cargo de Jaime Lastra. Los propuestos son Perla del Carmen Macossay Moreno, Nicolás Bautista Ovando y Elías Germán Arzubide Dagdug; el segundo de la lista, actual vicefiscal encargado del despacho, es parte de la administración que encabezó Lastra y, como tal, pertenece al equipo que modernizó la institución.