La migración ilegal de mexicanos a Estados Unidos de América (EUA) ha crecido 48% y llega a niveles máximos. Tan solo en marzo de 2022, se registraron 87 mil 388 detenciones por parte de la Patrulla Fronteriza del país vecino, cifra nunca antes vista y que exhibe el crecimiento en el flujo de indocumentados, motivado por la pobreza y la violencia.
De acuerdo con cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) de EUA, en el primer trimestre de este año aumentaron 48.7% las capturas de connacionales, al pasar de 147 mil 554 en el mismo periodo del 2021 a 219 mil 413 en 2022. Al mismo tiempo, el registro de menores de edad, también alcanzó un récord, al contabilizar 3 mil 235 detenciones en marzo.
Mientras tanto, el Gobierno de México presume como un logro de gobierno, que aumentaron las remesas, pero es debido a la expulsión de más mexicanos a EUA, porque en esta administración no se brindado oportunidades para una vida mejor a miles de familias mexicanas.
Según el Banco de México (BANXICO), el país registró 51.594 millones de dólares en 2021 en remesas extranjeras, provenientes de Estados Unidos en su mayoría. Una cifra récord que refleja nuestra dependencia económica al vecino del norte.
En enero de este año, la entrada de remesas a México fue de casi 3,300 millones de dólares (mdd). El aumento de las remesas es un logro de los mexicanos que el país expulsó por falta de empleo y oportunidades. También este incremento se explica por los apoyos que ha dado el gobierno estadunidense a su economía y los latinos han sido clave en la recuperación económica de esa nación.
Por otra parte, dentro de esas remesas no se puede negar, que hay un componente de lavado de dinero. Las remesas de EUA a México son positivas, pero no son la solución para la economía nacional. Si bien es cierto, se trata de un apoyo económico de consideración para las familias mexicanas, ya que son personas que migraron al no encontrar oportunidades de bienestar.
Las cinco entidades federativas que más ingresos por remesas extranjeras recibieron en 2021 fueron: Jalisco (5,235.3 mdd); Michoacán (4,984.1 mdd); Guanajuato (4,308.0 mdd); Estado de México (3,145.4 mdd) y; Ciudad de México (CDMX) (2,942.9 mdd). Tabasco ocupa la posición 27 en este ranking nacional con 430.1 mdd en 2021.
La tasa de desempleo en México aumentó .3 puntos porcentuales mensual en mayo. La informalidad aumentó 0.1 punto porcentuales en las personas ocupadas (57.1 millones). La precarización de la economía mexicana es evidente, 32.8% de la población ocupada ganó hasta un salario mínimo y 32.7% ganó entre 1 y 2 salarios mínimos, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
La inflación está imparable, con una tasa de variación anual del Índice de Precios al Consumo (IPC) en México en junio de 2022 del 8% (3 décimas superior a la del mes anterior): la mayor en 21 años y se prevé cierre el año hasta en 8.4%.
La inflación en 22 entidades federativas se ubica por arriba de la media nacional. Los estados con mayor inflación anual en el país en la primera quincena de junio de 2022 fueron Oaxaca (10.2%), Campeche (9.6%), Chiapas (9.5%) y Morelos (9.4%). Los estados con menor inflación son Querétaro (6.5%), CDMX (6.5%), Baja California Sur (6.7%) y Estado de México (6.9%), según el INEGI.
Debido a la inflación, el peso mexicano ha perdido un 56% de su valor adquisitivo. Por ejemplo, lo que antes se podía adquirir con 440 pesos hoy se adquiere por 1,000 pesos.
Por si fuese poco, las políticas de Estado del gobierno del presidente López Obrador, generaron ya 10 solicitudes de arbitraje ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial -principalmente en el sector energético-, sumándose a los 23 litigios de sexenios anteriores que nos podría llegar a costar miles de millones de dólares, obligando al Estado mexicano a destinar importantes recursos para compensar a inversionistas, en lugar de atender las necesidades más urgentes del país. Afectando aún más, la confianza en México como país atractivo a la inversión extrajera. Recordemos que, desde 2019 México está fuera de la lista de los 25 países más atractivos para canalizar Inversión Extranjera Directa (IED).
Sin certeza jurídica, no hay más inversión y, por lo tanto, no hay crecimiento ni empleo. Por ello, debido a las débiles perspectivas de inversión en el país, instituciones como Moody's bajó la calificación crediticia de México para su deuda soberana, que pasó de Baa1 a Baa2, aunque con un cambio en la perspectiva, que cambió de negativa a estable. Sin embargo, esta degradación implica un mayor riesgo para las finanzas públicas, ya que los apoyos a Petróleos Mexicanos; programas sociales; paquetes fuera de presupuesto (como el Paquete contra la inflación y la carestía o PACIC) y las crecientes pensiones sofocan a las arcas nacionales.
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