/ miércoles 9 de enero de 2019

¿A salvo Núñez de ir a la cárcel?

Arturo Núñez Jiménez cumple 71 años el próximo día 23. (El 19 celebrará su aniversario de bodas). Aquellos que anhelan verlo pronto en la cárcel, podrían sufrir una fuerte frustración. De entrada, hay que recordar que Andrés Granier Melo permanece entambado -aunque pronto estará dentro de jaula de oro que es su residencia en Ciudad de México- no por el saqueo que hizo en Tabasco, sino por delitos fiscales.

El dato de la edad de Núñez es relevante, habida cuenta de que le lleva un año a Granier, quien por esa consideración no quedará precisamente en libertad, sino gozando de ese beneficio de ley. Así pues, en el mejor de los casos, desde la perspectiva del pueblo de Tabasco, lo más probable sería que si se le logran fincar responsabilidades y quede vinculado al debido proceso, se le deje libre bajo fianza o se le encierre en su mansión de la capital del país o en la Cerrada de Macayo.

Pero la consideración más sobresaliente es que quienes firman la documentación y ejecutan los hechos ilícitos son los secretarios de Finanzas, Salud, Desarrollo, Administración, etcétera. De manera, entonces, que la posibilidad de que se encarcele a Núñez radica en que los funcionarios altos y de medio pelo ya enjuiciados suelten la sopa y señalen como autor intelectual de los desvíos y hurtos al ex gobernador.

Este martes, la legislatura local eligió a Jaime Lastra Bastar -ex procurador, ex secretario de Gobierno, entre otros cargos, además de productor ganadero y agroindustrial- como fiscal general para un periodo de nueve años. 31 diputados votaron por él; entre ellos, el pícaro de Agustín Silva Vidal, coordinador parlamentario del PRD y viejo compinche de Núñez, quien se esmeró en el abrazo público hacia quien probablemente lo meterá a la cárcel.

Lastra Bastar sonrió en ese momento, al igual que lo hizo al saludar a muchas otras personas, antes y después del evento al cual acudió el gobernador Adán Augusto López Hernández; lo que seguramente no impedirá, llegada la hora, para que le deje caer la guillotina al adinerado politiquillo que hasta enero de 2013 estaba en la quiebra, aun cuando antes aprovechó otras oportunidades que le brindó Arturo para saquear.

López Hernández reveló que -independientemente de la “desaparición” de 800 millones de los mil 600 que envió el Presidente Obrador a Tabasco en los últimos días de diciembre- en caja encontró solo 480 millones de pesos y de esa cantidad 460 están etiquetados para el pago de impuestos antes del 12 de enero.

El gobernador espera recibir recursos federales el 13, para proceder al pago del gasto corriente habitual, adicionalmente a los 800 millones que se les quedaron a deber a servidores públicos, en activo, y pensionados y jubilados, además de que hay que cubrir adeudos a proveedores; con mayor urgencia, a los del sector salud.

Pero, ¿las consideraciones legales y de edad significan que no pondrá pie Arturo Núñez en la cárcel? Nos resistimos a creer que pudiere suceder eso, porque además la presión social es muy fuerte y conlleva severas implicaciones políticas. Estamos convencidos de que el que busca encuentra. Acaso sea cuestión de revisarles a Núñez, familiares y probables prestanombres cómo andan en su situación patrimonial y en ahorritos.

El gobierno mexicano dispone de los recursos necesarios para realizar una investigación profunda que permita sustentar acusaciones en contra de quienes llevaron a Tabasco a la peor crisis económica y social de la historia. Es razón de estado. Ni perdón ni olvido.

Por otra parte, ¿por qué habríamos de compadecernos del otro chelito pillo?

Arturo Núñez Jiménez cumple 71 años el próximo día 23. (El 19 celebrará su aniversario de bodas). Aquellos que anhelan verlo pronto en la cárcel, podrían sufrir una fuerte frustración. De entrada, hay que recordar que Andrés Granier Melo permanece entambado -aunque pronto estará dentro de jaula de oro que es su residencia en Ciudad de México- no por el saqueo que hizo en Tabasco, sino por delitos fiscales.

El dato de la edad de Núñez es relevante, habida cuenta de que le lleva un año a Granier, quien por esa consideración no quedará precisamente en libertad, sino gozando de ese beneficio de ley. Así pues, en el mejor de los casos, desde la perspectiva del pueblo de Tabasco, lo más probable sería que si se le logran fincar responsabilidades y quede vinculado al debido proceso, se le deje libre bajo fianza o se le encierre en su mansión de la capital del país o en la Cerrada de Macayo.

Pero la consideración más sobresaliente es que quienes firman la documentación y ejecutan los hechos ilícitos son los secretarios de Finanzas, Salud, Desarrollo, Administración, etcétera. De manera, entonces, que la posibilidad de que se encarcele a Núñez radica en que los funcionarios altos y de medio pelo ya enjuiciados suelten la sopa y señalen como autor intelectual de los desvíos y hurtos al ex gobernador.

Este martes, la legislatura local eligió a Jaime Lastra Bastar -ex procurador, ex secretario de Gobierno, entre otros cargos, además de productor ganadero y agroindustrial- como fiscal general para un periodo de nueve años. 31 diputados votaron por él; entre ellos, el pícaro de Agustín Silva Vidal, coordinador parlamentario del PRD y viejo compinche de Núñez, quien se esmeró en el abrazo público hacia quien probablemente lo meterá a la cárcel.

Lastra Bastar sonrió en ese momento, al igual que lo hizo al saludar a muchas otras personas, antes y después del evento al cual acudió el gobernador Adán Augusto López Hernández; lo que seguramente no impedirá, llegada la hora, para que le deje caer la guillotina al adinerado politiquillo que hasta enero de 2013 estaba en la quiebra, aun cuando antes aprovechó otras oportunidades que le brindó Arturo para saquear.

López Hernández reveló que -independientemente de la “desaparición” de 800 millones de los mil 600 que envió el Presidente Obrador a Tabasco en los últimos días de diciembre- en caja encontró solo 480 millones de pesos y de esa cantidad 460 están etiquetados para el pago de impuestos antes del 12 de enero.

El gobernador espera recibir recursos federales el 13, para proceder al pago del gasto corriente habitual, adicionalmente a los 800 millones que se les quedaron a deber a servidores públicos, en activo, y pensionados y jubilados, además de que hay que cubrir adeudos a proveedores; con mayor urgencia, a los del sector salud.

Pero, ¿las consideraciones legales y de edad significan que no pondrá pie Arturo Núñez en la cárcel? Nos resistimos a creer que pudiere suceder eso, porque además la presión social es muy fuerte y conlleva severas implicaciones políticas. Estamos convencidos de que el que busca encuentra. Acaso sea cuestión de revisarles a Núñez, familiares y probables prestanombres cómo andan en su situación patrimonial y en ahorritos.

El gobierno mexicano dispone de los recursos necesarios para realizar una investigación profunda que permita sustentar acusaciones en contra de quienes llevaron a Tabasco a la peor crisis económica y social de la historia. Es razón de estado. Ni perdón ni olvido.

Por otra parte, ¿por qué habríamos de compadecernos del otro chelito pillo?